Iván González: de experto en protección de datos a 'gurú' de la seguridad infantil en internet desde Málaga
El también CEO de Privacidad Global lleva tres libros publicados para ayudar a los padres a controlar lo que hacen sus hijos en la red
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Málaga/No son tiempos fáciles para entender internet: la irrupción de la inteligencia artificial, el repunte de las ciberestafas y, en definitiva, la velocidad a la que se implementan nuevos conceptos requieren un esfuerzo homérico para estar al día. No hablemos ya para navegar siquiera de forma aparentemente segura. Aspecto del que adolecen sobre todo aquellos usuarios que tienen hijos y comienzan a usar los móviles. Y, en muchos casos, a tener los primeros problemas... Un entuerto que se ha propuesto resolver Iván González, CEO de Privacidad Global, trasladando su labor diaria a la escritura, cosa que ha materializado en la publicación de tres libros (y, adelanta, vienen más), con el objetivo de que las familias sepan localizar los peligros que esconde el universo online y sean capaces de prevenirlos.
Toda una hazaña que este abogado de Villanueva del Trabuco lleva a cabo nutriéndose de los casos que llegan a su empresa de protección de datos cada día y del feedback que le remiten los padres. Pero con un toque muy especial: intercalando temas complejos con un tono didáctico. Y mucho buen rollo. "Siempre me he considerado un abogado un poco peculiar, friki y empollón", cuenta entre risas. Premisas bajo las que ha lanzado al mercado Cuaderno de jueretos y hojas de ruta del método canguro digital: ejercicios y formularios para proteger a tus hijos en internet; Descubre cómo proteger a tus hijos en internet y Una imagen vale más que mil palabras: conoce los riesgos de publicar fotografías de tus hijos en internet; dispuestos de menor a mayor dificultad: "Lo configuro como si fuera el colegio. Empieza en parvulitos y ya va por secundaria".
Una aventura que arrancó de una forma "más sencilla de lo que parece". "Yo le contaba estas cosas a mis hijos, pero me di cuenta de que en el colegio los profesores no podían hacerlo". Lo que se une a la tendencia de los padres a "darle los móviles a los niños para que no mareen". El caldo de cultivo perfecto para la catástrofe. Aunque el proceso de escritura, es de recibo reconocerlo, está teniendo alguna que otra dificultad añadida, puesto que (ahí el reto) la tecnología no para de avanzar. "A los ocho meses de la primera publicación, llegó la avalancha de la IA", cuenta.
Desde entonces, ha abordado multitud de cuestiones, que corren paralelas a los problemas de varias generaciones. Uno imperante, y muy serio, es, por ejemplo, la confección de montajes porno por parte de los escolares con fotos de sus compañeros. "Antes, cuando los niños hacían estas cosas, usaban Photoshop, que es algo que ya nos suena muy viejo y se notaba mucho que no era real; ahora lo hacen con IA y da el pego", cuenta. Cómo confrontarlo: en el libro.
Otros sucesos que ocurren "a diario" son los que surgen a raíz de las redes sociales, los videojuegos y las plataformas de vídeo en directo. "Ahora los streamers le dicen a los jóvenes que tienen que apuntarse a su academia para ser libres financieramente, que con dos horas al día pueden sacarse un sueldazo, que no es necesario estudiar ni ir a la Universidad, y que aquello que han hecho sus padres de trabajar ocho horas durante décadas y tener un mes de vacaciones está desfasado", apunta. Esto, además, en muchas ocasiones, va aparejado de un reclutamiento. Porque por cuantos más amigos consiga captar, teóricamente, ganará más. Como se puede imaginar, la mayoría de las veces todo es humo, por lo que suele acabar en estafa. Muchos padres, lamenta, se dan cuenta demasiado tarde.
Aunque no todas estas malas practicas, avisa, son llevadas a cabo por los hijos. A veces son los propios padres quienes pueden llegar a meter la pata. Un tema al que dedica bastante tiempo es la huella digital. Le preocupa quienes inundan las redes con fotos de sus hijos menores. Y quienes comparten memes hirientes. "Párate un segundo. Piensa que el protagonista de ese vídeo en el que sale un niño cayéndose, que te parece tan gracioso y estás a punto de compartir, es tu hijo. ¿Lo reenviarías?". También aquí hay donde actuar.
Con todo, la mayor parte de los tres libros se centran en la correcta tutela de los hijos para usar internet. Algo que, explica, no es tan común como se pudiera pensar. "Todo el mundo te dice que le preocupa este tema pero pocos hacen algo". "Estadísticamente, siete de cada diez no hacen nada; los tres restantes tienen un control parental en el móvil, pero seguramente no todo lo efectivo que puede ser. La mayoría están demasiado centrados en su trabajo y su vida: en correr, correr y correr". Visto lo visto, quizá solo por evitar problemas, sea bueno echar el freno y pararse un rato a leer.
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