Editorial
Rey, hombre de Estado y sentido común
La directora de la Fundación Picasso-Casa Natal, Lourdes Moreno, se perfila para dirigir el Museo Thyssen de Málaga tras la dimisión de María del Carmen López y será así si la fundación que rige la pinacoteca acuerda hoy nombrar para ese puesto a quien quedó en segundo lugar en el concurso convocado en su día.
Fuentes del ámbito artístico aseguraron ayer que la designación de Moreno depende de que el patronato de la Fundación Palacio de Villalón apruebe una propuesta para que el procedimiento de elección sea ese. López obtuvo la mayor calificación en el concurso de selección efectuado en su momento y tras ella se situó Moreno, que ocupa desde diciembre de 2006 la dirección de la fundación de la Casa Natal de Pablo Picasso de Málaga.
Moreno es licenciada en Geografía e Historia, ejerció como conservadora de la casa natal hasta su nombramiento como directora (en sustitución de Mariluz Reguero) y en su trayectoria coordinó ciclos monográficos sobre Picasso, impartió conferencias sobre su obra y es autora de varias publicaciones. En caso de que se optara por esa fórmula de designación, Moreno accedería a la dirección del Museo Carmen Thyssen de Málaga el próximo 15 de mayo y, mientras, asumirá las atribuciones del cargo la jefa del Registro de la pinacoteca, Verónica Castillo.
La fundación celebra hoy una sesión extraordinaria y urgente para abordar, entre otros asuntos, la asignación provisional de las funciones de la dirección artística y la propuesta relativa al proceso de selección del nuevo director artístico. Además se tratará la información relativa al programa de exposiciones temporales de este año y la propuesta de aprobación del contrato de préstamo de la colección. El patronato conocerá también la dimisión de la directora del Thyssen y la renuncia a su condición de patrono de Tomás Llorens. El pasado lunes se supo que ambos habían comunicado su decisión al Ayuntamiento de Málaga, impulsor del museo inaugurado el pasado 23 de marzo. Ella la justificó "en el incumplimiento de determinados pactos" contenidos en su contrato. Por su parte, el historiador y crítico de arte Tomás Llorens confirmó su dimisión al considerar que este museo "ha dejado de tener el grado de credibilidad histórico artística que debería esperarse de un museo de su naturaleza". Llorens se refirió en estos términos al nombramiento de Javier Ferrer, jefe de Alcaldía en el Ayuntamiento, como gerente del museo, y apuntó que esta incorporación se debía exclusivamente "a una trayectoria política, sin formación en materia artística ni cultural". El pasado miércoles, el alcalde, Francisco de la Torre, confirmó que Llorens y la propia Carmen Thyssen venían manteniendo un pulso por imponer su influencia en el seno del Patronato. De esta forma, si ya en el primer organigrama se contemplaba la presencia de un director artístico y un gerente, Tomás Llorens logró convencer al Patronato para fundir ambos puestos en una sola dirección. A finales del pasado febrero, la baronesa decidió recuperar la figura del puesto de gerente y contratar a Ferrer después de que sólo se hubieran formalizado tres contratos y de que IU hubiera denunciado irregularidades tanto en los contratos de materiales como de personal.
Con Lourdes Moreno en el Museo Thyssen, el alcalde se garantizaría una dirección de plena confianza sin (al menos a priori) conflictos con Javier Ferrer, mientras que la baronesa, propietaria de las obras de la colección permanente, rubricaría su hegemonía en el Patronato. Quedará por ver el rumbo que tomaría el centro con Lourdes al frente en cuanto a exposiciones temporales.
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