El Ayuntamiento de Málaga abonará en octubre 600.000 euros a la Academia de Cine por los Goya

Málaga/Despejado el camino para que Málaga acoja la gala de los Goya el 25 de enero de 2020, la maquinaria ha echado ya a andar (seis meses pasan volando) e, inevitablemente, los primeros pasos a dar son de carácter financiero. Cuando la semana pasada se anunció oficialmente la designación malagueña para los Goya, de inmediato se anunció la concreción de un presupuesto de dos millones de euros dirigidos a la entidad organizada, la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de España, a repartir a partes iguales entre el Ayuntamiento de Málaga, la Diputación provincial, la Junta de Andalucía y Unicaja. Pues bien, el Consistorio ha mostrado especial celeridad en este asunto y ya ha comprometido el pago a la Academia de 500.000 euros, más 105.000 correspondientes al IVA (al 21%) a través de un contrato de patrocinio gestionado directamente a través del Festival de Cine, la sociedad que se ha confirmado como primer instrumento de la acción municipal en este asunto; de hecho, el gasto se establece con cargo a los presupuestos del certamen para este año, que tras su aprobación este miércoles entran en vigor este jueves. El pliego de condiciones del contrato, al que ha tenido acceso este periódico, contempla la fecha del 15 de octubre para la emisión de la factura por el importe total del mismo.

En cuanto a las obligaciones correspondientes, la Academia de Cine se compromete como contratista a “hacer los mayores esfuerzos para colaborar con los eventos de carácter cinematográfico que tendrán lugar en Málaga en las fechas previas a la gala que acuerden los partes”, así como “a facilitar (...) el uso de las marcas vinculadas con los Premios Goya y la Academia de Cine para promocionar la celebración de la gala en la ciudad de Málaga”. Igualmente, la Academia asume el diseño artístico de la gala, el pago a los presentadores (que, previsiblemente, volverán a ser Andreu Buenafuente y Silvia Abril), el pago a los artistas invitados que actúen en la gala, el diseño y la construcción de la escenografía, el diseño y la contratación de iluminación y sonido (tanto en lo relativo al escenario como a las necesidades para la retransmisión de la gala), la contratación de los servicios de retransmisión a TVE, la promoción y publicidad del evento y los desplazamientos y alojamientos de académicos, nominados y familiares, prensa especializada, el equipo de TVE y los mismos organizadores de la Academia del Cine Español.

Por su parte, el Festival de Cine será el “responsable del pago del canon en concepto de colaboración principal” (y resulta singularmente llamativo el uso del término canon) y de “asumir los costes de la colaboración accesoria”, que incluye la adecuación del Palacio de los Deportes Martín Carpena para la gala, con las siguientes actuaciones señaladas: la construcción de una gran tarima para el decorado y el montaje de todo el backstage, la colocación de entre 400 y 450 butacas para nominados, entregadores y autoridades en la zona de pista, la cobertura del suelo de la misma zona (así como de las escaleras y accesos a las butacas empleadas dentro del recinto) con moqueta de feria, la instalación del photocall (incluidos los cubrimientos y el suministro de potencia), la instalación de dos carpas en el parking para el acceso a la gala, la delimitación y provisión de las salas de prensa, la habilitación de los camerinos (mobiliario incluido), la provisión de dos salas para patrocinadores y la “eliminación, en la medida de lo posible, de la sensación de polideportivo, como las paredes de linóleo, los suelos de cemento y las luces de neón”. Además, el Festival de Cine se encargará también del cóctel de clausura, que se servirá “en el anillo superior perimetral del Palacio de los Deportes Martín Carpena” y que podrá acoger a unas tres mil personas. El Festival de Málaga correrá con el coste de esta “colaboración accesoria” aparte de la cantidad comprometida para el contrato, lo que supondrá un gasto añadido, según los cálculos del propio Ayuntamiento, de unos 700.000 euros. El gasto total se corresponde así con la partida de 1,4 millones de euros que el Ayuntamiento mandó reservar el mes pasado para la gala.

Añade el pliego los siguientes términos: “La celebración de eventos culturales, como la gala de los Goya del cine español, convierten, sin lugar a duda (sic), a la ciudad en que se celebra en una fuente generadora de beneficios directos e inducidos. Estos beneficios se concretan en promoción de la imagen de la ciudad de Málaga y su provincia, así como la dinamización económica de la zona durante las fechas en las que tiene lugar el evento”. Cabe recordar en este sentido que Sevilla cifró en cinco millones de euros el impacto económico directo que generó en la ciudad la pasada gala de los Goya. Eso sí, las previsiones al respecto brillan aún aquí por su ausencia.