Una gran muestra sobre Picasso como escultor, protagonista en Málaga en el 50 aniversario de su muerte
Le exposición, que permanecerá en el museo hasta septiembre, pone en el punto de mira una cara menos conocida del genio
La muestra 'Picasso escultor. Materia y cuerpo' en imágenes
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Málaga/Pablo Picasso sale del lienzo y revive en Málaga, una vez más, en el Museo Picasso Málaga, a traves de la exposición 'Picasso escultor. Materia y cuerpo', que forma parte de programa internacional 'Celebración Picasso 1973-2023' realizada con el apoyo del Musée national Picasso-Paris y la Comisión Nacional Española como parte de los actos conmemorativos por el 50 aniversario de la muerte del artista. La exhibición de las esculturas permanecerá en la ciudad natal de Pablo Picasso desde el 8 de mayo hasta el próximo 10 de septiembre para llevarla en otoño al Museo Guggenheim Bilbao, que ha sido el segundo pilar organizador de la muestra. Además, el traslado de las obras a Bilbao son un hecho histórico puesto que allí nunca han tenido una exposición de Picasso pese a que fue donde sucedieron los actos que se ilustran en el 'Guernica', como ha destacado la comisaria, Carmen Giménez.
A la inauguración han asistido diversas persnalidades del ámbito de la cultura y la política como el consejero de Turismo, Cultura y Deporte y presidente del Patronato Museo Picasso Málaga (MPM), Arturo Bernal; el presidente del Consejo Ejecutivo MPM y copresidente de la Fundación Almine y Bernard Ruiz-Picasso (FABA), Bernard Ruiz-Picasso; el comisionado para la conmemoración del 50 aniversario de la muerte de Picasso, Carlos Alberdi; Carmen Giménez, comisaria de la exposición; el director territorial Sur de Telefónica España, Joaquín Segovia Alonso; el presidente de la Fundación Bancaria Unicaja, José M. Domínguez; el consejero de Cooperación y de Acción Cultural de la Embajada de Francia en España y director general del Institut français de España, Eric Tallon; José Lebrero Stals, director artístico del MPM; y el diputado de Cultura, Manuel López Mestanza.
La exhibición de las esculturas picassianas, que toma como eje la curiosidad del artista por el cuerpo humano femenino y sus movimientos, pasa por distintas fases y materiales que representan las vivencias y el contexto en el que ser realizaron, destacando algunas obras como Cabeza de mujer (Fernande) o Guitarra, así como otras menos alegres y que hacen referencia directa a las guerras que vivió el artista: "Hubo una época en la que no se podía fundir metales por la guerra, así que él decidió fundir algunas esculturas suyas para hacer nuevas", destacaba la comisaria de la exposición, destacando la versatilidad del artista también en el uso de materiales poco comunes a lo largo de su faceta escultórica: "No es escultura clásica. Él era un gran inventor".
Como singularidad, las salas que ahora acogen en su interior el conjunto de obras escultoricas, algunas al descubierto y otras entre mamparas de metracrilato, no tiene ningún boceto ni dibujo en exposición, ya que la finalidad principal era alejar los famosos trazos de Picasso para concentrar al público en su obra más tangible en la conmemración de los 20 años de existencia del Museo Picasso de Málaga. Durante estos años, las paredes del museo han visto el paso de aproximadamente 1.500 obras del genio malagueño que han disfrutado nueve millones de visitantes.
Sobre su nombre recaen grandes obras como el 'Guernica', 'Las señoritas de Avignon' o 'Las Meninas', con un estilo único e inimitable en cada una de sus etapas, por lo que la primera palabra que se asociaa él es la de pintor, no la de escultor, ya que se calcula que pudo hacer unas 700 esculturas frente a los aproximadamente 4.500 cuadros que realizó. y unque Pablo Picasso es más destacado en su faceta de pintor, la escultura fue crucial en su desarrollo con artista desde la niñez cuando los recortes de papel ya afianzaban los primeros pasos como escultor de quien hoy es un referente artístico del siglo XX, tal y como resaltaba el presidente de la Fudación Unicaja, José M. Domínguez: "Su escultura causar asombro y admiración, algo que tendremos la oportunidad de contemplar en esta exposición". Ese estupor traspasa los muros del espacio expositivo para convertirse durante el 50 aniversario de la muerte de Picasso en mucho mucho más que una exposición: "La finalidad es celebrar su vida, su obra y su legado artístico", sentenciaba el director general del Institut français de España, Eric Tallon.
Málaga se ha volcado con Picasso y su obra en el año de su 50 aniversario. Tanto es así, que actualmente hay tres exposiciones dispuestas sobre el artista de las 50 oficiales que componen el itinerario de 'Celebración de Picasso 1973 -2023': 'El eco de Picasso', que versará sobre la II Guerra Mundial, su influencia en el arte de Pablo Picasso y las últimas generaciones, y 'Las edades de Pablo', que corre de la mano de la Casa Natal. Todas ellas forman parte del programa oficial denominado como el Año Picasso para recordar al artista que llevó Málaga al mundo.
En el caso del interior del Museo Picasso de Málaga convive su obra pictórica con las esculturas recién llegadas de diversos puntos culturales de España y Francia. En Málaga, que se ha convertido durante el último año en una auténtica oda a él en cada rincón de la ciudad, el Museo Picasso toma dos plantas dividiendo la exposición 'Picasso escultor. Materia y cuerpo' entre el cielo e infierno, entre luces y sobras, entre cotidianidad y conflicto, dejando en el aire la pregunta que verbalizaba la comisiaria frente al gran bronce que cerraba la sala: "¿Quién no es un poco picassiano?".
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