Rafael Ábalos indaga en la técnica de los videojuegos en 'Poliedrum'

Trabajaba en una novela para adultos, pero la convocatoria del premio As de Picas se cruzó en su camino: nada menos que una iniciativa de Play Station, el poderoso sello de los videojuegos, para fomentar la lectura a partir del reconocimiento de obras literarias inspiradas en la lógica y la mecánica del pasatiempo audiovisual favorito de esta época. A Rafael Ábalos (Archidona, 1956) le rondaba la idea desde hacía tiempo, tenía algún material escrito y decidió rematar la faena al abrigo del galardón: el resultado fue Poliedrum, novela con la que finalmente se hizo con el premio y que acaba de publicar la editorial Viceversa. "Admito que la novela está escrita de forma precipitada, pero a veces son los acontecimientos los que indican a uno cuándo corresponde terminar una obra", explicó a este periódico el autor de la saga Grimpow, uno de los grandes hitos de la literatura fantástica y juvenil en castellano, con traducciones y reconocimientos producidos en medio mundo; "simplemente, creí que se trataba de una buena oportunidad y la aproveché", apuntó.

Poliedrum está ambientada en Edimburgo, "una ciudad especialmente propicia para este tipo de historias por su carácter misterioso, llena de leyendas que confluyen por todas partes y un aire medieval y fantasmagórico". La acción arranca con el extraño asesinato de un popular autor de cómics y cuenta las aventuras de tres jovencitos que acceden a Poliedrum, una dimensión desconocida repleto de ignotas criaturas en la que lo imposible parece hacerse realidad a cada paso y en la que no faltan insólitos peligros. La historia reproduce, a partir del acceso a esa nueva dimensión, la técnica narrativa del videojuego, con episodios trazados como escenas en las que los protagonistas deben solventar una serie de pruebas para pasar a la siguiente. "Esta emulación del videojuego me permite contemplar un mismo suceso desde distintos puntos de vista, desde diversos ángulos; por eso, literariamente resulta muy interesante, por mucho que el punto de partida haya sido la escritura y la creación de los personajes: de lo contrario, el trabajo se habría quedado en un mero guión de videojuego", apuntó el escritor. A raíz del premio, de hecho, Play Station ha abierto las puertas para la conversión de Poliedrum en un videojuego, "aunque aún es prematuro confirmar nada porque la situación económica también es delicada para la industria".

El hilo de Poliedrum, primera parte de una futura trilogía, gira en torno a la figura del héroe "como alguien portador de determinados valores a quien se pretende emular, lo que tiene muchas posibilidades también a nivel educativo", y en este sentido comparte con Grimpow su carácter iniciático, como expresión del tránsito de la adolescencia a la madurez. ¿Y aquella novela para adultos? "Ahora podré recuperarla con más tranquilidad". Para gozo de sus lectores.