Una Victoria por sorpresa
Aunque Ida Vitale se postulaba como la gran favorita, el jurado acabó decidiéndose por María Victoria Atencia como una manera de reconocer a las poetas española
La primera gran sorpresa en las siete ediciones del Premio Lorca. En el primer año de su candidatura, presentada por la Universidad de Málaga, María Victoria Atencia se impuso en las deliberaciones finales a los nombres de Ida Vitale y Nicanor Parra. Con el poeta chileno se discutió el inconveniente de su delicado estado de salud, aunque se llegó a proponer viajar a Chile para entregarle el galardón. Pero al final, Atencia ganó por mayoría contundente y el premio no tendrá que coger un avión para ir a Suramérica.
Tras el fallo del jurado, Laura García-Lorca se mostró contenta, como cada año. Pero la sobrina nieta del poeta de Fuente Vaqueros tenía un punto más de satisfacción. “Nos conocemos personalmente y es un premio muy merecido, es una voz muy original dentro de la poesía española”, afirmó en el hall del Palacio de Quinta Alegre. “Además siempre se alegra una porque como persona está a la altura de su obra, cosa que no siempre sucede por desgracia”.
Antonio Sánchez Trigeros, representante de la Academia de Buenas Letras, se mostró también “muy de acuerdo” con el fallo aunque su propuesta, como todos los años, era el granadino Rafael Guillén. “Creo que hemos acertado plenamente porque es una de las voces más personales y está manteniendo ese poderío que siempre ha tenido y es una mujer con muchos registros y está en plenitud poética y personal”, afirmó. “Ha sido la musa poética de Málaga durante años y ha participado en multitud de actos en Granada”. ¿Se podría pensar ya en futuras ediciones en premiar a algún granadino sin visos de chovinismo? “Como presidente de la Academia de Buenas Letras siempre defiendo a Rafael Guillén, que está en total plenitud y es el gran poeta vivo de Granada del siglo XX”, respondió Trigeros.
Julia Escobar, representante de la Casa América y ‘defensora’ de la candidatura de Ida Vitale, se confesó “gran admiradora” de la poeta malagueña. “Creo que ha sido un soplo de aire fresco en muchos sentidos porque no se había presentado antes y sus méritos han sobresalido”. En su opinión, Atencia está en la línea de poetas que no ha accedido a los grandes premios. “Ella ha sido una mujer poco reconocida para sus méritos y no me siento para nada frustrada porque no haya ganado la candidata de la Casa de América”. ¿Justicia poética? “Exactamente, la némesis de los antiguos”.
Por su parte, Álvaro Salvador, representante de la Universidad de Granada, afirmó que se habían creado expectativas falsas con algunas candidatas, aunque Ida Vitale sí era favorita porque el año pasado llegó a las últimas deliberaciones. “El jurado ha querido premiar la poesía escrita por mujeres en España porque la escrita en Hispanoamérica se había premiado ya con Blanca Varela”, destacó. “Atencia se ha adaptado a su propio desarrollo y a los cambios del mundo y este premio puede abrir un punto de atención hacia su obra, porque los grandes premios como el Reina Sofía no se han fijado todavía en ninguna poeta española”. En su opinión, “ya va siendo hora porque tenemos magníficas escritoras como Chantall Maillard”.
También conforme con el fallo del jurado se mostró Julio Neira, representante de la Huerta de San Vicente. “Es un premio muy claro a una trayectoria poética de gran autenticidad y gran coherencia sin concesiones a las modas”. A continuación situó históricamente a las mujeres que como ella “clamaron en el desierto” durante años. “La poesía española ha tenido una irrupción muy importante de mujeres como Gloria Fuertes, conocida por su trabajo para niños pero una excepcional poeta. Hoy en día tenemos una presencia normalizada de la mujer en cuanto a su escritura aunque es verdad que todavía las antologías son muy cicateras con las mujeres”. En la pasada edición fue elegido ganador José Manuel Caballero Bonald (Jerez de la Frontera, 1926), mientras que en la edición anterior el premio se fue para el hispano-mejicano Tomás Segovia. En 2007, el valenciano Francisco Brines se alzó con el galardón; en 2006 fue escogida la peruana Blanca Varela; en 2005 el mexicano José Emilio Pacheco; y en 2004 recibió el galardón el poeta ovetense Ángel González. Ahora hacen sitio en la Luna para acoger a María Victoria Atencia.
1 Comentario