Cuarenta años en los escenarios de Hombres G ( y pocos son)

Marbella/Cuatro décadas. Cuarenta años. Más de 14.000 días. Es el tiempo que Hombres G, la banda de David Summers, lleva tocando por los escenarios de toda España. De toda. Y a tenor de lo visto el sábado por la noche en el escenario del Starlite Occident de Marbella al grupo marbellí le queda mucha vida. En una noche para volver al colegio, para sentarse otra vez en el pupitre y para gritar que sí, que yo fui a la EGB, ofrecieron su clásico repetertorio, el de toda la vida, junto a algunos temas, nuevos, y el éxito, claro está, estaba garantizado.

Y más, por supuesto, si comienzan con Voy a pasármelo bien. Su carta de presentación ponía en pie al público de la cantera de Nagüeles, qué sitio tan bonito, y ya muchos de ellos, algunos con 60 años, ya no se volvieron a sentar más. Es lo que tiene estar enfrente de un banda que ha vendido más de 20 millones de discos, que está de vuelta, o de inicio, y que disfruta de la música como hace más de 14.000 días.

Y el público lo sabe. Y disfruta. Y por eso a David le siguen tirando sujetadores, no como cuando le llovían en los 80, pero da igual. Con Suéltate el pelo la tradición se volvió a repetir ante la sonrisa de todos.

"El amor por la música es lo que hace que cuatro tíos sean amigos 50 años y que a pesar de nuestras vidas personales: todos nos hemos divorciado, casado otras veces y sufrido cambios en esos años, en nuestra vida profesional no, porque la música es lo que nos mantiene siempre unidos", aseguraba Summers en una entrevista reciente. Y esa unión, de la que tanto presume y se siente orugulloso, hizo que el público disfrutara de una noche especial. Porque Marta volvió a tener un marcapasos, el público volvió a viajar a Venezia, se sintió muy bien y lo notó.

Pero faltaba un final apoteósico, como no podía ser de otra manera. Cuatro décadas lo merecían. La traca final con Sufre mamón: la historia de desamor juvenil más canalla de la historia de la música española. Y Marbella no sufrió. No hacía falta. Porque estaba de cumpleaños y de fiesta. Y en las celebraciones pasa eso, que todos nos desinhibimos porque sí, porque nos apetece. Larga vida a los Hombres G.