La investigación científica se alía contra el olvido en 'La Desbandá, 1937. De Málaga a los Pirineos'
Documentos, fotografías, testimonios y el resultado de años de investigación histórica ahondan en la huida de los refugiados desde Málaga hasta su llegada a la retaguardia republicana
La muestra se puede ver en el Centro Cultural Fundación Unicaja, en el Palacio Episcopal
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Málaga/Unas cañas de azúcar confeccionan un estrecho pasillo en el patio del Palacio Episcopal. Recuerdan los cañaverales que tuvieron que atravesar, que pisaron y comieron los refugiados que huían de las tropas anti republicanas tras la toma de Málaga. A través de ellas se llega a las dos salas de la planta baja del Centro Cultural Fundación Unicaja. Fotografías, documentos, testimonios, recortes de prensa y vídeos sumergen al espectador en el triste episodio de la Desbandá de febrero de 1937.
El resultado de décadas de investigación de las profesoras de la Universidad de Málaga Encarnación Barranquero y Lucía Prieto, junto con sus compañeros Andrés Fernández, Isabel Brenes y Juan Francisco Colominas, ha hecho posible esta muestra, organizada en colaboración con la Secretaría de Estado de Memoria Democrática y la Fundación Unicaja.
La Desbandá, 1937. De Málaga a los Pirineos supone, como han explicado este viernes en la presentación de la muestra, a la que ha asistido el Ministro de Consumo, Alberto Garzón, un trabajo que profundiza más allá del episodio de la huida y el acoso que sufrieron en la salida hacia Almería. El proyecto sigue los pasos de los grupos de refugiados hasta su llegada a distintos puntos de la retaguardia republicana.
"En los paneles está el resultado de la investigación histórica, también se muestran los originales de las fotografías de Robert Capa, reproducciones y originales de la prensa de la época que dieron noticia de que Málaga estaba acosada y apunto de caer o había caído en manos de las tropas anti republicanas, principalmente italianas", explica la comisaria Encarnación Barranquero.
También, apunta, se pueden ver "las fotos de los refugiados cuando llegaron a Valencia, a Madrid, que son documentos del Ministerio. También hay una reproducción de testimonios, un vídeo que ha hecho la Universidad de Málaga de los lugares por donde pasaron los malagueños hace 85 años y otro vídeo sobre la vida de los refugiados malagueños en Cataluña".
Todo esto, considera la investigadora, "forma un conjunto documental importantísimo, de máximo interés, algunas fotos son inéditas para la mayoría en incluso eran desconocidas para nosotros los investigadores que llevamos años detrás de este tema".
Barranquero explica que después de llegar a Almería casi toda la población fue dispersada por todas las zonas republicanas, por Valencia, por Castellón. "Vemos cuestiones muy curiosas como que los grupos que salían de algún pueblo de Málaga se mantenían juntos, hay quien ha seguido la pista hasta Francia a grupos salidos del pueblo de Casares", indica.
Subraya la profesora de la UMA que el Centro Documental de Memoria Democrática todavía arroja información a los estudiosos que se adentran en él. Y más aún han conseguido desde que se ha puesto en consulta la documentación militar. "Hemos podido también ver el agravante que supuso en consejos de guerra el haber corrido por la Carretera de Almería. Utilizaban la frase era “huyó ante la llegada del ejército salvador”. También fue un motivo de depuración en el trabajo", agrega la investigadora. Y fue una penalización en todos los trámites administrativos durante la dictadura.
"Tenemos datos de niños que se perdieron, que se encontraron, niños que había en Murcia de padres malagueños, el gobernador civil de Murcia le preguntaba al de Málaga, también al revés… Había un trasiego que refleja las consecuencias dramáticas de este episodio", comenta. "La exposición rememora los acontecimientos dramáticos que se vivieron hace 85 años, que fue la huida por la única vía libre que dejaron los militares de las fuerzas rebeldes contra la Málaga republicana hacia el 7 y 8 de febrero de 1937. Este acontecimiento no fue olvidado, la dictadura procuró borrarlo pero de puertas adentro y en voz baja siempre fue recordado", añade Barranquero.
La salida y luego el regreso con la consiguiente represión o el exilio fueron consecuencias traumáticas para la población refugiada malagueña. "Nuestras investigaciones desde hace 35 años se han dirigido a desvelar la represión franquista y el sufrimiento de la población civil, especialmente el caso de las mujeres", destaca la comisaria de la muestra junto a su compañera Lucía Prieto.
Tratar el acontecimiento con sus porqués
Tras los años y las miles de horas inmersas en archivos provinciales, locales y nacionales, la recogida de cientos de testimonios y memorias de los familiares, "creemos haber conseguido tratar este acontecimiento con sus porqués. Y una de las líneas más importantes que está llevando a cabo la historiografía actual es insistir en el sufrimiento de la población civil ante las guerras, un hecho constante hasta la actualidad".
Otra novedad que tiene esta exposición y es que el recorrido no solo se limita a Málaga y Almería, sino que tratan de explicar el camino desde la zona del Campo de Gibraltar, Sevilla, Cádiz y la comarca norte de Málaga, que confluyeron primero en Marbella y luego en la capital malagueña para iniciar el camino que acabaría para muchos en los Pirineos.
Igualmente, como destaca Lucía Prieto, han estudiado a los protagonistas del suceso dentro de la categoría de refugiados y se han estudiado las políticas de acogimiento lideradas por el gobierno republicano. También se ha ido más allá para saber desde dónde llegaban los que siguieron su éxodo a través de la carretera de Almería.
"Esta exposición se enmarca en la voluntad de Unicaja por trabajar en proyectos de calidad contrastada y sensibilización con la historia. Esta muestra ubicada en las dos salas de la planta baja del Palacio Episcopal, recoge un amplio estudio historiográfico de lo acaecido en Málaga y un un conjunto de voces que narran en primera persona lo que supuso aquel triste episodio de nuestra historia más reciente", apunta Emilia Garrido, responsable de Artes Plásticas y Espacios Museísticos de la Fundación Unicaja.
El Secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez-López, ha destacado que "las heridas del pasado siempre se curan con más conocimiento, también con justicia y reparación". Y destaca que esta muestra cumple con dos objetivos, el carácter conmemorativo por los 85 años y el pedagógico, "crear conciencia".
Y, por encima de todo, Martínez-López sostiene que la "dignificación de las víctimas tiene que estar en el centro para combatir el olvido, porque el olvido es incompatible con la democracia".
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