Málaga apuesta por la lectura en los meses de verano

En la librería Luces, ubicada en Alameda, apenas se puede andar por los pasillos para buscar un libro en las estanterías. La gente se entretiene al leer los títulos de las obras cuando se siente atraída por las portadas. Algunos también los cogen y le dan la vuelta para leer la sinopsis y ojear alguna página interior. Si les convence, se lo llevan. Otros pasean con una montaña de ejemplares que van a adquirir para perderse entre sus páginas en los próximos días. "En verano hemos notado un repunte de ventas, hay más tiempo para leer en vacaciones", confirma a este periódico José Antonio, librero de Luces. Pese a haber un aumento en la compra, no destaca ningún género en concreto, sino que se venden de todo tipo.

Donde sí es más visible la subida de ventas de libros es en la sección de idiomas. "En nuestro caso, el idioma destacado es el inglés porque vienen muchos turistas a Málaga y lo compran en el idioma original", comenta. En la misma tesitura se encuentra la librería Proteo, que también recibe muchas visitas al mediodía en búsqueda de una nueva aventura literaria: "Como hay mucho turismo en esta ciudad, hemos notado un repunte en los libros escritos en inglés". Además, los que se venden más en esta temporada, según dice, son los de tipo bolsillo, ya que son "mucho más cómodos" para llevárselos de vacaciones, a la playa o a cualquier otro lugar.

Sobre el género que más consumen los lectores, Jonatan sostiene que es algo "muy cíclico" y que las personas buscan algo para "evadirse". Va por temporadas: quizás aumenta el consumo de novela histórica, después el romance e, incluso, las guías. También influye que publique un autor conocido como Julia Navarro, Joël Dicker o Javier Castillo. "Dentro de poco, Carmen Mola va a publicar una nueva novela y seguramente se ponga de moda y haya un aumento de ese género", explica. Jonatan indica que en agosto también hay más ventas porque uno de los motivos se debe al cheque de la vuelta al colegio, pero que el principal es "siempre la novedad" de un escritor reconocido.

En Proteo destaca una saga de seis libros que está triunfando este verano: Blackwater, de Michael McDowell. "Está ambientado en un pueblo de Estados Unidos y es el que más se está llevando la gente ahora, eso te lo podemos asegurar todos los libreros", señala Jonatan. Otro de los más vendidos en la librería es Donde nace el cielo, de Miguel Ruiz Montañez. Pese a que la novela histórica es el género más vendido, lo que más destaca es el formato de bolsillo, de cualquier género, pero con un tamaño "mucho más ligero y más cómodo" para los desplazamientos de estos meses.

Por otro lado, la librería Luces también confirma la tendencia al alza de la serie Blackwater. Sin embargo, José Antonio detalla que no es algo significativo: "Hay un reparto muy equitativo, no hay nada que destaque mucho en general. De hecho, los que más se venden son los libros que se recomiendan en nuestros clubes de lectura". También se siguen vendiendo libros de autores de renombre como el malagueño Javier Castillo, pero "no hay un aumento en verano, se compran a lo largo del año independientemente del momento".

En cuanto a si se lee más en físico o en formato electrónico, José Antonio sostiene que "han crecido ambas formas", pero que, al ser una librería de venta física, no puede asegurar cuál ha subido más. Jonatan, de Proteo, defiende que el papel ha adelantado al formato electrónico: "El libro electrónico ha bajado mucho en este tiempo, nosotros también tenemos ventanas de libros electrónicos en nuestra página web, que se pueden descargar directamente ahí, y se siguen vendiendo, pero la gente al final prefiere acudir al libro en papel". 

Tal y como indica el librero de Proteo, personas que tienen el libro electrónico lo compran por la "curiosidad de leerse una novela" y que "no se quiera gatar ese dinero" en un libro físico, ya que son más baratos y el precio oscila entre los cinco y seis euros. "Pero los lectores al final van acudiendo al papel porque se trata de su autor favorito o porque es una saga y quiere continuar la saga", señala. Otra de las razones de las ventas de libros físicos es que la lectura en formato electrónico haya gustado tanto que quiera tenerlo en papel para "guardarlo y tenerlo en casa".