Ave del paraíso, el nuevo mural de Bosska que ilustra la libertad de Torremolinos
El trabajo se ha realizado en una pared de 180 metros cuadrados de la plaza Vicente Aleixandre
Está en consonancia con un lugar donde "la gente venía a vivir sus vidas como fuera cada uno", ha confesado la artista
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Torremolinos luce una nueva obra de arte urbano que puede ser visitado y fotografiado. Se trata de un mural de 180 metros cuadrados realizado por la ilustradora y muralista Bosska. El título es Ave del paraíso y se encuentra ubicado en la nueva plaza Vicente Aleixandre del municipio de la Costa del Sol. Está protagonizado por una mujer, que es la figura central, a la que le rodean especies autóctonas -ave del paraíso e hibiscus- y el agua, que representa el paraíso. "Ave del paraíso es la que da título al mural, que es la flor que está a la izquierda de la cara de la mujer", según cuenta la artista a este periódico.
Este trabajo está en consonancia con un lugar donde "la gente venía a vivir sus vidas como fuera cada uno", un sitio donde "se ha acogido mucho a las personas que vienen de fuera". El mural está enfocado a dar "visibilidad a la parte femenina". "Representar un poquito la figura de la mujer también en conexión con los esfuerzos en materia de igualdad que está haciendo el Ayuntamiento", señala.
La presencia de la figura femenina es de "gran importancia" porque "sugiere una conexión profunda" con la naturaleza y favorece el entorno local. Además, transmite a la ciudadanía el mensaje de "compromiso social", en consonancia con el trabajo de igualdad del Ayuntamiento de Torremolinos. Este mural parte de la reforma de la plaza de Vicente Aleandre por parte del Ayuntamiento para la "regeneración urbana" del barrio El Calvario.
Morado, verde, negro, azul, rojo, naranja y amarillo son los colores predominantes de la obra, pero no están elegidos al azar. Según ha expresado la muralista, la gama de colores que aparecen son parte de su seña de identidad y concuerdan con la apuesta por la diversidad que se ha llevado a cabo en el municipio, estrechamente relacionado con el colectivo LGTBI desde hace décadas. Ha utilizado los mismos colores que la bandera del arcoíris para compartir su arte con los torremolinenses.
La muralista e ilustradora ha reconocido que es una "estudiada combinación de colores" que remata la obra con un despliegue de "vivacidad y optimismo". El mural en su conjunto cuenta con los elementos y conceptos que se han combinado para dar forma a una obra de arte única y exclusiva que "va más allá de lo estético". Bosska pretende a través de Ave de paraíso que los colores ayuden con la representación del mensaje que quiere transmitir a todo aquel que observe el trabajo realizado.
Para llevarlo a cabo, ha necesitado más de 200 botes de pintura en spray y ha dedicado ocho días al desarrollo de Ave del paraíso. Ha utilizado una grúa con la que poder abarcar la gran superficie que abarca el mural, ya que son 180 metros cuadrados de pared. “Aunque han sido unos días de fuerte calor, ha sido una experiencia inolvidable pintar este mural por la gran acogida que ha tenido, viniendo público desde todos los rincones de Torremolinos”, remarca Bosska.
Uno de los mayores retos a los que se ha enfrentado a la hora de hacer el boceto es el formato de la pared, porque no es una pared cuadrada: "Tiene arriba una chimenea y un pequeño cobertizo, decidí integrar la ilustración al formato de la pared". No hizo la figura de la mujer más pequeña para que se viera entera, sino que incluyó "ese trozo que se corta sobre la cara de la mujer". "Me parece algo que da lugar a interpretaciones por parte de la gente porque es un espacio que podemos autocompletar con la imaginación", asegura.
No se trata de la primera obra de la artista, ya que en 2021 también se encargó de ilustrar el mismo barrio (El Calvario) con un mural de gran formato que representa la libertad y diversidad propia de Torremolinos, titulado Un oasis en Torremolinos. Este trabajo mide 14 metros de altura y cuatro de anchura y forma parte del proyecto de revitalización de espacios para impulsar el turismo y el arte promovido por el área de Cultura. Bosska ya cuenta con dos piezas para dar color al municipio y dejar su sello.
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