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Málaga/En tierras gallegas y con temperaturas más favorables para el estudio, la pianista malagueña Paula Coronas prepara ya la nueva temporada. Este año se inicia pronto. Su primera cita internacional es el 7 de septiembre en el festival italiano del Lago de Como. "Les he propuesto hacer mis músicos españoles y les ha encantado la idea", explica Coronas. Así, la primera parte del concierto estará protagonizada por la Suite Española de Albéniz, la que interpretará completa con sus ocho piezas. En la segunda tocará composiciones de Eduardo Ocón, Granados y el músico barroco Padre Soler. Pero antes de esto tiene una cita más próxima, un concierto en el Palacio de Beniel de Vélez-Málaga el 18 de agosto.
En primavera de 2019 la esperan en la ciudad de Beringen, Bélgica. "A este festival llevaré la música de Antón García Abril, Albéniz y Falla. Hay bastante expectación, la música española está muy bien acogida fuera de España", dice la pianista. En Berlín también actuará entre mayo-junio en una fecha aún por cerrar. Dentro del panorama nacional, Paula Coronas tocará en Madrid y Teruel en sendos conciertos con los que se celebran los 85 años del maestro Antón García Abril, compositor en el que la malagueña es una especialista. Estos recitales se irán conjugando con la intensa actividad que le genera ser la directora artística del ciclo Miradas al Sur, que financia la Fundación Unicaja.
Estos encuentros, en los que ella misma participa como intérprete además de contar con músicos invitados, llegan a su tercera edición con el reto de saltar las fronteras de la provincia malagueña y extenderse al resto de Andalucía y Ciudad Real. De hecho, la nueva temporada empieza el 19 de octubre en Sevilla con un recital de Paula Coronas para inaugurar la nueva sala La Casa de los Pianistas. "Ahí todo lo que hago es nuevo, un repertorio de Turina, también algunas piezas de Ángel Barrio, algunos de los cuadernos de Iberia de Albéniz y del malagueño Eduardo Ocón tocaré Rapsodia Andaluza y Gran Vals Brillante", comenta la artista, que el 26 de octubre repetirá programa en el nuevo auditorio del Museo Íbero de Jaén. Miradas al Sur le llevará también al Gran Casino de Ciudad Real el 19 de noviembre. Allí el repertorio cambiará para incluir compositores románticos como Chopin, Granados y Liszt.
Esto será para iniciar la tercera edición del ciclo, que ofrece una decena de conciertos hasta junio y que tiene como objetivo la divulgación del repertorio español. De manera conjunta con el Ateneo de Almodóvar del Río también organizarán un recital en dicha ciudad el 29 de septiembre. "Estoy dedicando muchas horas de estudio al repertorio nuevo", confiesa. "Trabajar a un detalle muy profundo, intentar entrar en el pensamiento del compositor es lo que te lleva más tiempo", agrega Coronas. El poco tiempo que deja en su calendario sin actuaciones lo invierte, precisamente, en la selección del repertorio para la próxima temporada. "Qué quieres transmitir y comunicar a través del repertorio que eliges es muy importante, así voy buscando mi propia identidad", dice y reconoce que la música española y muy especialmente la andaluza y malagueña son sus pasiones. De ahí que la temporada anterior la haya dedicado a tocar un programa nuevo, "he ampliado mucha obra no sólo de Málaga sino también de Andalucía", apunta y señala lo "intensa" y gratificante que ha sido.
Y no quiere concluir este recorrido por su nuevo calendario, al que se enfrenta "muy ilusionada", sin recordar el concierto del 9 de octubre en la Sala María Cristina a favor de Autismo Málaga en el 25 aniversario de esta asociación.
Sin ser demasiado consciente de ello al principio de su camino, Paula Coronas empezó a destacar por su especialización en el repertorio español, en el que ya ha basado parte de su carrera. "Me hace ilusión pensar que pueda tener ahí mi sitio, en esa recuperación de la música española", estima. "Voy teniendo un nombre, me llaman, me invitan para que toque ese repertorio y eso te da satisfacción. La personalización es lo que te hace trascender, hay que lograr identificarte con algo", agrega. Y más aún si en el fondo "es mi pasión, lo que me ha llevado a perseverar más". También está empeñada en el estudio y visualización de compositoras que quedaron relegadas a las sombras, como Clara Vieck o María Rodrigo, cuyas figuras no se estudian ni en los conservatorios.
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