Roberto Scholtes
Implicaciones de una Reserva Federal en pausa
La lectura de los datos de la EPA (Encuesta de Población Activa) del 4T de 23 reflejan la resiliencia del mercado laboral español, a pesar del endurecimiento de las condiciones financieras por parte del BCE y las tensiones inflacionistas, entre otros factores. España afronta el comienzo de año con positivos datos en términos de empleo y ocupación, y una moderación de la tasa de desempleo.
Según los datos publicados por el INE, en España se crearon 783.000 empleos en los últimos 12 meses. A su vez, en el 4T, el número de ocupados cayó en 19.000 personas en términos trimestrales, situándose la ocupación en 21.246.900 personas. Paralelamente, el paro descendió en 24.600 personas; por lo que la tasa de paro retrocedió hasta un 11.76% de la población activa (vs. 11,84% el trimestre anterior). En este sentido, en el conjunto del año, el paro disminuyó en un total de 193.400 personas. A corto plazo, la evolución del empleo no sólo estará sujeta al deterioro de la actividad en Alemania y Francia, sino también a la evolución de los costes laborales y de la productividad, especialmente en el caso de las empresas de menor tamaño.
También te puede interesar
Lo último