El ‘Stella polare’

De vez en cuando, las aguas del puerto malacitano reciben a unos veleros muy especiales que en la mayoría de las ocasiones pasan desapercibidos. Adscritos a diferentes marinas de guerra, estas unidades que muy bien podrían calificarse como buques escuela, habitualmente atienden a la denominación de barcos de entrenamiento; una peculiaridad semántica que sirve para diferenciarlos de los grandes veleros que además de instruir por largos periodos de tiempo a estudiantes militares también sirven como embajadas flotantes de sus respectivos países.

Realizada esta aclaración, les diré que estos barcos de entrenamiento básicamente se usan para que los futuros marinos de guerra aprendan a navegar impulsados por el viento; una reminiscencia del pasado que se mantiene en la mayoría de las marinas militares del mundo.

Atendiendo a esta circunstancia y, con el añadido que estos veleros a los que me estoy refiriendo suelen ser de corte clásico y de pequeñas dimensiones, la opción de que participen en determinadas regatas es un hecho muy frecuente de ver en los historiales de estos barcos. Y así, con el recuerdo de las estancias malagueñas de veleros de la Armada española o las marinas de guerra polaca, sueca o francesa entre otras, hoy les reseñaré la visita que hace unos días realizó una unidad de la Marina Militare italiana.

Luciendo el nombre Stella Polare y la numeral A-5313, la zona no concesionada del muelle número dos, durante varias jornadas fue testigo de la presencia de este barco, un velero de dos mástiles con 58 años de vida en la mar. Construido en los astilleros genoveses de Sangermani en 1965, este velero que atendiendo a sus especificaciones técnica sería un yawl con velas bermudianas, nada más ser botado fue asignado a la Academia Naval de Livorno. Con 21,47 metros de eslora y con capacidad para embarcar a 16 tripulantes, este barco, fabricado con maderas de: caoba, iroko, roble y teca, además de servir para la instrucción de los futuros marinos de guerra italianos ha participado en un significativo número de regatas internacionales.

Un interesante barco militar de entrenamiento que, como otros muchos, ha pasado por el puerto de Málaga sin pena ni gloria.