Salvador Merino
Vaya tropa
Tener un propósito en esta vida es bendita ilusión. Más con tanto redoble de tambor y murga electoral. El escapismo provisional es una opción feliciana. El frikismo cumple su función terapéutica para liberar la mala vibración y enfocarse en tareas recreativas y humanistas. Una válvula que libera los gases de la presión social y mala onda de los precios de la vivienda y próspera precariedad urbanística de moda. El retrato robot de la primera cosecha de geeks, o seres aficionados a los videojuegos, tecnología y sushi, que a la madurez lucen gorra, es el de un ente cuarentón con camiseta negra y barbas canas. Un paisano crecidito con familia y obligaciones propias con tendencia al cacharreo informático que se escapa a estos mundos de fantasía, eruditos y fascinantes.
Si los cofrades se extasian con el nuevo tejado de la catedral que causa notición de portada, los frikis estamos de enhorabuena por otras convenciones marcianas y también cercanas. En calle Alcazabilla el Cine Albéniz en colaboración con OXO Museo del Videojuego van a reponer películas talismán de los años 70 y 80 en pantalla grande. El ciclo ¡Qué grande es ser friki! rescata iconos en versión original con subtítulos en español. La idea es proyectar un miércoles al mes títulos legendarios a partir del presente abril. Los primeros pases confirmados son: 24 de abril Juegos de Guerra (1983, John Badham),
Encuentros en la tercera fase (1977, Steven Spielberg) el 22 de mayo, el 19 de junio Blade runner (1982, Ridley Scott) y el 17 de julio Gremlins (1984, Joe Dante). En efecto, estos fotogramas los tenemos muy vistos…en televisión. En el cine son otra cosa. A algunas producciones se las pillará la trampa y el cartoon, absolutamente todas sorprenderán por su creatividad. Culminando el revisionado retro se promete un coloquio tras cada proyección con especialistas e invitados. Tarea asignada a Santiago Bustamante, director cultural de OXO Museo del Videojuego, muy conocido en el ambiente syfy por su programa dominical Fallo del Sistema de Radio 3. Un punto muy ochentero con auténtica propuesta de hipermercado en plan 2x1 (entrada de cine y debate) por 6 pavos y 5€ para los socios del Club Albéniz. Todas las películas se proyectarán a las siete de la tarde. Se trata de una invención de OXO Museo Videojuego Málaga con la colaboración del Cine Albéniz, Málaga Procultura y la Universidad de Málaga. Umitas en Cenacheriland.
También te puede interesar
Salvador Merino
Vaya tropa
La esquina
José Aguilar
¿Tiene pruebas Aldama?
El balcón
Ignacio Martínez
Motos, se pica
Por montera
Mariló Montero
Mi buena vecina