Editorial
El estrés de la Justicia
EL presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha confirmado que, el próximo día 21, se reunirá con su homólogo de la Generalitat valenciana, el socialista Ximo Puig, para tratar de la financiación autonómica, un modelo que a todas luces está desfasado y que tiene pendiente una revisión que ningún Gobierno central se atreve a acometer. El hecho de que Andalucía y Valencia traten el asunto al más alto nivel no es un tema menor. La comunidad levantina es la peor financiada de España -con una diferencia de 25 puntos con la mejor, Cantabria- y Andalucía ocupa el tercer puesto por la cola, tras Murcia. No deja de ser incomprensible que dos de las regiones con el peso demográfico, histórico y económico de Andalucía y Valencia lleven años infrafinanciadas, un déficit que en el caso andaluz asciende a los 10.835 millones de euros desde 2009, según datos de la Junta. Por tanto, la reunión de Ximo Puig y Juanma Moreno es absolutamente pertinente y necesaria. Es más, tendría que haber sido una realidad mucho antes. Además, es alentador que se produzca entre dos administraciones que, hoy por hoy, están en manos de dos partidos adversarios, el PP (Andalucía) y el PSOE (Comunidad Valenciana). Por encima de los intereses de partidos están los de los ciudadanos andaluces y valencianos y, por una vez, sus máximos representantes autonómicos así lo han comprendido. Pero la reunión entre Ximo Puig y Juanma Moreno no puede quedar en una mera escenificación. Es hora de hacer valer la capacidad de presión de ambas comunidades para que el Gobierno se dé cuenta de que es importante cambiar un sistema que condena a los ciudadanos de las comunidades más pobladas de España a recibir unos servicios públicos más escasos y de peor calidad que los de otras comunidades. No se trata de ser insolidarios y de pedir privilegios en la financiación, como se hace desde otros territorios, sino de recibir lo que la lógica aritmética indica: a más población se necesitan más recursos para atenderla. El día 21 debería ser el inicio del fin de esta injusticia.
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