La tribuna
La guerra de las portañuelas
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Mi amiga Remedios de los Dolores Magín, vidente y espía, me llamó el pasado martes para comunicarme su última peripecia. Como algunos lectores podrán recordar, Reme es la pitonisa personal de Pedro Sánchez, al que le echa las cartas a diario en la Moncloa, y también ejerce de agente secreto; espió un tiempo para la antigua KGB rusa, y hasta ahora para el servei d’espionatge de Cataluña. Pero desde que Salvador Illa preside la Generalidad no le encargan ningún trabajo. Y lo que es peor, han dejado de pagarle su merecido sueldo. Reme se ha quejado a su admirada colega, la profetisa Mars Topor, esposa de Carles Puigdemont y, el ex president la ha colocado como espía del Consell de la República catalana, que correrá con el pago de su retribución. Reme y Mars, viejas amigas, se conocieron en un congreso europeo de magia celebrado en Brujas (Bélgica), y juntas han prestado grandes servicios al pueblo catalán.
Reme, compañera de curso y eterna novia platónica de Ábalos, es una lectora empedernida y algo borrachina: bebe demasiado anís del Mono.
En todo caso, la maga Magín acaba de terminar su primer informe para el Consell. Lo titula, La guerra de las portañuelas. Ayer me lo remitió por correo electrónico.
“Estimado president, querido Carles:
Los políticos españoles sólo se rigen por la bragueta (dentro o fuera del matrimonio). Recuerdo de niña cómo el doctor Poyato, especialista en urología, dijo a mi hermano menor: “Máximo, con una pequeña intervención, te voy a dejar un miembro primoroso”.
Parece que este médico valenciano atendió a José Luis Ábalos, entre otros muchos miembros de la clase política levantina. El ex ministro lleva varios matrimonios y numerosas relaciones sentimentales. Desde 2018 se relacionó con una sugar baby: jovencita que proporciona intimidad sexual a cambio de “apoyo financiero”. Jessica, que así se llama la dulce chica, tenía sueldo fijo de una empresa del ministerio, piso de lujo gratis que pagaba (presuntamente) Aldama, y cobraba dietas por los viajes, con una tarifa variable según el destino internacional o el kilometraje patrio, que reclamaba a Koldo. Y mi querido José Luis, iluso, presumía de haber ligado por su bella cara. El muy chulo, miembro del club de los sesentones, ha tenido a la “estudiosa” Jessica retirada del “fulaneo” de los bares de alterne.
Otro miembro distinguido del panorama de la bragueta política es Íñigo Errejón. Se ignora quién es su urólogo. Este miembro de Sumar ha sido denunciado como acosador sexual por una actriz; aseguran que se irán sumando más mujeres. Por lo visto, Errejón llevaba una vida oculta en la que, además de tener las manos largas, sacaba su miembro viril con rapidez y cierta frecuencia. Rita Maestre, antigua novia y correligionaria de este rijoso líder, lo ha criticado viniendo a decir que, cuando convivían, él habría podido llegar por las noches a la casa común después de violentar a chicas veinteañeras. Lo mismo, entonces, tras la cena, se contaban sus hazañas diurnas. Íñigo, mentiroso de bragueta de armar, le diría: ‘una jornada estupenda, he comprobado que soy un miembro relevante a todos los efectos’. Y Rita, le contestaría: ‘pues yo hoy me he quedado en sujetador en el interior de la capilla de la Complutense mientras otras compañeras proferían cánticos soeces contra la Iglesia Católica: una brillante acción anticlerical’. En su día, Errejón le dio un fugaz piquito a Manuela Carmena. Se entendió como un episodio de camaradería y especial agradecimiento por las exquisitas magdalenas que solía regalarle la ex alcaldesa. En la actualidad, Íñigo es un miembro podrido de la extrema izquierda.
El miembro número uno del PSOE también muestra su excitación braguetera llamando “pichona” a su esposa. Sánchez, arrogante y exquisito impostor, ha demostrado que no tiene redaños para ser un digno presidente del Gobierno. Achicado y pálido, huyó por las calles de Paiporta dando la espalda a la tragedia del pueblo valenciano y al jefe del Estado (al Rey).
Por su parte, Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la comunidad autónoma de Madrid, se pone los pantalones para justificar el turbio pasado de su novio. Una popular “miembra” (invención verbal de la ex ministra Aído) del panorama político estatal.
“President, ¡por bemoles, completa amnistía, concierto fiscal y declaración unilateral de independencia. Sánchez está temblón y sin neurólogo; es el momento!”.
Visca Catalunya Lliure. Besos a Mars. Un abrazo”.
Me temo que Reme sigue con el bebercio: un informe impropio, tanto de estilo como de contenido; y su título lo ha copiado del último libro de Leonardo Padura (Ir a La Habana).
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