La Cueva de Nerja presenta 'El gran viaje interior' para promocionar la historia de la gruta

El presidente de la Fundación Cueva de Nerja, Javier Salas, ha presentado este jueves la campaña que la cavidad muestra en Fitur y que lleva por título 'Cueva de Nerja: El gran viaje interior'. En ella se invita a visitar, conocer y disfrutar este enclave único de una manera diferente: a través de "su historia y su magia".

Así, la campaña invita a pensar en la trayectoria de la cueva a lo largo de los miles de años que tiene su historia poniendo el énfasis en que es un lugar que ofrece un viaje a través del tiempo y de la evolución.

Resalta el alto grado de interés que, para todos los públicos, tiene la Cueva de Nerja, dotándola de una fuerte personalidad tanto visual como conceptual para conectar y crear complicidad con un mensaje que destaca que "no hay nada más moderno y actual que viajar, y sobre todo si se hace para llegar a 35.000 años atrás".

La ocupación humana de la Cueva de Nerja se remonta al Paleolítico, con una presencia atestiguada desde hace algo más de 45.000 años --según dataciones de material--. Esto significa que es una de las cuevas europeas con una frecuentación más extendida en el tiempo. Además es una de las cavidades donde los humanos llegaron a mayor distancia desde la entrada, realizando recorridos de gran complejidad.

Los grupos humanos utilizaron la gruta como refugio y lugar de habitación, donde descansar y realizar sus actividades cotidianas: elaboración y fabricación de instrumentos de piedra y hueso, procesado de alimentos para su consumo y conservación, creación de adornos corporales y otros. Las zonas más profundas de la cueva fueron utilizadas para realizar pinturas rupestres y grabados. También fue utilizada como lugar de enterramiento.

1959: El descubrimiento de la Cueva de Nerja

Hasta el año 1959 la entrada de la Cueva de Nerja quedo escondida debido a la sedimentación, pero ese año cinco jóvenes de la localidad: José Luis Barbero, Francisco Navas, los hermanos Manuel y Miguel Muñoz y José Torres la descubrieron, adentrándose por una pequeña fisura por la que buscaban murciélagos, ya que les veían entrar en ella.

Desde ese momento, la cavidad se ha ido convirtiendo en uno de los monumentos más visitados de Andalucía y en un patrimonio de reconocimiento internacional siendo declarado Bien de Interés Cultural en 2006. Su fama es tal que desde su descubrimiento hasta la actualidad ha recibido casi 19 millones de visitas, sumadas a lo largo de estos 64 años.

Además, la gruta está marcada por la apuesta por la calidad y la innovación, destacando, entre sus principales objetivos, el de estar a la vanguardia para poder prestar el mejor servicio a sus visitantes, una proyección que este 2023 llega de la mano de la realidad virtual, una tecnología con la que la gruta se acerca más a sus visitantes y se vuelve más accesible.