Puerto Marina cumple 30 años como símbolo de Benalmádena y tramitando la ampliación

"La joya de la corona de Benalmádena". Así definió la alcaldesa, Paloma García Gálvez (PP), al puerto deportivo de la localidad, un enclave que ayer cumplió treinta años y que se ha convertido en uno de los recintos portuarios más conocidos del Mediterráneo. Por ello, la regidora no quiso que esta fecha pasase desapercibida para los vecinos, pues recordó que, en su momento, la instalación supuso un "revulsivo" para la localidad. El 9 de octubre del año 1982 Puerto Marina abrió sus puertas por primera vez al público. Se trataba de un espacio único en la Costa del Sol, pues estaba dotado de una imagen muy especial que hizo posible el arquitecto Eduardo Oria. De hecho, sus edificios de apartamentos e instalaciones permanecen intactos a pesar de los años transcurridos.

"En 1982 se vivía en el país una situación de crisis económica y gracias a la construcción de esta marina los benalmadenses tuvimos un importante empuje económico y turístico", recordó la alcaldesa. Para conmemorar esta fecha se estudia organizar una muestra fotográfica en la que se recojan momentos de su extensa trayectoria.

En sus comienzos, según indicó el edil de Puerto, Francisco Salido, la marina se construyó para dar cabida a 1.172 puntos de atraque, un número que no ha variado en estos años. Salido informó de que ahora también las miras están puestas en el futuro, pues ya se está tramitando el proyecto de ampliación que hará posible aumentar el número de atraques hasta 2.000. Así Puerto Marina se convertirá en uno de los puertos más importantes de Europa al proyectarse un varadero de 26.000 metros cuadrados y zonas comerciales que ocuparán un área de 30.000 metros cuadrados.