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Emperatriz
Axarquía/A una semana de la DANA más grave del siglo en España, a pesar del cansancio, decenas de voluntarios de la comarca de la Axarquía, entre otra parte de España, siguen con el compromiso de ayudar a los damnificados. Ya se han enviado toneladas de alimentos y materiales y se preparan más desplazamientos para esta semana. En todos los municipios se ha abierto, como mínimo, un punto de recogida, e incluso algunas personas se aventuran personalmente para aportar su granito de arena en la lucha. El largo trayecto, a la suma del paso de los días, hace que las asociaciones voluntarias admitan estar "exhaustas". Aun así, no se plantean reducir las ayudas y seguirán "hasta que podamos aguantar". Los voluntarios que van se sinceran y explican que "vuelven diferentes" al vivir por sus propias carnes semejante tragedia.
El 30 de octubre, Cristianos de la Axarquía inició una campaña de recogida de alimentos. Los coordinadores, Esteban Chodié y María García, no sabían lo que se generaría tras un breve post con un cartel, ni tampoco lo que se encontrarían en Valencia, por mucho "que nos preparáramos y viéramos sobre el tema", según explica Chodié. El sábado 2 de noviembre diez personas salieron con cuatro furgonetas para ayudar en la medida de lo posible a las víctimas de la DANA. Cuando llegaron a Alfafar, se encontraron un panorama "aterrador y horrible. Por mucho que veas en la televisión, leas, te cuenten o escuches, es imposible de describir lo que se vive cuando se llega a allí. Se te rompe el corazón al ver las calles, a las personas, la dura realidad. "Tengo que admitir que desde Vélez-Málagasalió un Esteban, y de Valencia volvió otro", explica el organizador de la asociación.
García comenta que el Ayuntamiento de la localidad ayudó en todo momento, los comercios, y cientos de voluntarios no pararon de trabajar. La pareja, (Chodié y García), prepararon psicológicamente a sus voluntarios jóvenes, de unos 15 a 20 años. Aun así, "los chicos vinieron destrozados, justamente nos combinó ver como sacaban a dos cuerpos sin vida. Pero en parte, esto les ha venido bien para aprender la cruda realidad de la vida", añade el voluntario. La pareja destaca "que a pesar de la desilusión, y el sentimiento lógico por la tragedia, en parte es un orgullo ver como hay tantos voluntarios ayudando y trabajando. Aunque llegará el momento, que "ese sentimiento de euforia se rebaje a la realidad y se echen cuentas de la catástrofe".
Respecto a toda la información que circula, Chodié expresa que "hay mucha desorganización, y en ocasiones no dejan entrar a las personas con suministros, cosa que por una parte comprendo, porque está todo paralizado, pero no puede darse. Me dio la sensación de que las autoridades estaban estorbando".
Sobre el regreso, el voluntario se sincera: "Estoy exhausto, organizamos todo esto con muchas ganas, pero llevamos 40 horas sin dormir, regresamos el mismo día de Valencia, y nada más llegar nos esperaron tres tráileres y cientos de productos para enviar de nuevo, además soy autónomo y se me está empezando a acumular el trabajo". Todo esto "merece la pena y se seguirá haciendo, quiero agradecer a todos por la colaboración y la difusión de nuestro mensaje", expresa el pastor de Cristianos de la Axarquía, quien ha confirmado que junto a su mujer han creado un grupo de colaboradores de más de 60 personas.
Los voluntarios inician un viaje a Valencia, lo que se traduce en unas seis horas y media, incluso más dependiendo del municipio. Una vez allí, según explican, tienen que aparcar muy lejos y andar mucho, en ocasiones cerca de una hora. Así lo explica Carlos Villena, joven originario de Torrox que vive en Valencia capital y se ha viralizado, representando a la Axarquía y a su pueblo. "Salimos sobre las 9:00, andamos una hora diaria, además del tiempo de autobús, y trabajamos sin descanso en la zona a la que vayamos, en mi caso, cada día voy a un municipio diferente. Después, se almuerza y sobre las 18 horas nos volvemos a casa", esta es la rutina diaria que realiza el joven junto a varios amigos. Respecto a los voluntarios que salen de Torrox, "ellos se tiran más de seis horas en carretera, descargan y se tienen que volver sin descanso", añade Villena.
Villena lleva como voluntario desde el primer día. "La cosa sigue más o menos igual. Es brutal la colaboración, no para de llegar ayuda. Pero hay discordancia hasta en diferentes calles, se habilita un paso, te echan, te vuelven a mandar y te tienes que volver de nuevo. Los militares no se comunican con los bomberos", aclara el joven. El voluntario ha ayudado en Catarroja, Paiporta y Masanasa. Aunque la aportación "está siendo brutal, se ha notado que es lunes, que es laborable", comunica el joven.
Además, "se empieza a notar el cansancio, la gente de aquí apenas puedes descansar, y por las noches siguen robando. Incluso rompen cristales de los coches para obtener los papeles del seguro", explica el originario de Torrox, que también coincide con el resto de relatos y describe "un escenario post apocalíptico". El voluntario seguirá ayudando: "Mañana iré a ayudar a una amiga, que por cierto, tuvieron que salvar a su abuela, varios la llevaron a un tercer piso, por suerte, están bien", comunica Villena, quien se reunió con Lucas Atencia, otro voluntario de Torrox y que volverá con Ángel Villena, de El Morche. "El martes a las siete de la mañana nos vamos a Valencia a Algemesí. Nuestras donaciones se la estamos dando al Ayuntamiento de Torrox, y bueno, mañana llevaremos más por nuestra parte", expresa el voluntario de El Morche.
Desde Benamocarra también salieron varios vehículos a Alcudia. José Ramón Palomo, vecino del municipio y concejal explica , su estancia en la zona cero: "Nada más llegar impresiona, desde el minuto uno, todo lleno de barro, un desastre. Había un olor muy desagradable. Unos valencianos nos ofrecieron amablemente lugar para dormir. Trabajamos como todos y repartimos todos los productos que llevamos". Así, lo que más le afectó fue cuando una pequeña de unos 8 años les gritó: "¡Agua, agua, después de cuatro días!".
Otro momento que vivió fue cuando uno de los voluntarios que le acompañó repartió pan, y "no se lo creían, los vecinos parecen que estaban viendo algo que no se había visto nunca". Agua y pan, algo tan simple como eso puede alegrar la cara de una persona y cambiar su día en momentos tan difíciles.
Así, Antonio Lara, vecino del mismo municipio, está preparando un viaje para Valencia en los próximos días.
Los vecinos de Vélez-Málaga han mostrado su enorme solidaridad con las víctimas y los damnificados por la DANA que ha azotado el este del país durante un fin de semana cargado de sentimientos, donaciones y lleno de gestos empáticos. El Ayuntamiento de Vélez-Málaga, que está gestionando las donaciones públicas que se están realizando en el municipio y canalizando toda la ola de solidaridad que recorre a los pueblos veleños, ha recogido casi 100 toneladas de alimentos y materiales durante el primer fin de semana en el que se han iniciado las donaciones.
Durante el sábado y el domingo, el Ayuntamiento de Vélez-Málaga y el edificio de la Antigua Azucarera de Torre del Mar han sido los puntos neurálgicos de recogida de alimentos no perecederos, artículos de limpieza y ropa. Con una respuesta masiva y conmovedora, el pueblo de Vélez-Málaga se ha volcado en los primeros días tras el impacto de la DANA en la zona este de España.
Así, el centro de logística municipal se ha ubicado en el Mercovélez, desde donde se está gestionando el envío de todas las colectas y donde se centraliza toda la solidaridad que estos días aún mantienen los vecinos del municipio de Vélez-Málaga. El alcalde, Jesús Lupiáñez, ha apuntado que el Ayuntamiento mantiene el contacto con las autoridades de la Comunidad Valenciana para gestionar de manera organizada todos los envíos. De igual manera, el dirigente ha apuntado que también están abiertas otras vías de ayuda a otros municipios de la provincia de Málaga, como Álora, y también de Castilla-La Mancha, también azotada por este temporal.
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