Una cuarta parte del alumnado de Alhaurín de la Torre muestra un uso problemático de Internet
Así se recoge en un estudio llevado a cabo por el Área de Servicios Sociales: un 7% cumple criterios de trastorno adictivo en relación a plataformas como TikTok o Instagram
El informe apunta que un número importante se conecta a redes sociales más de seis horas diarias y hasta ocho horas los fines de semana
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Una cuarta parte del alumnado de Educación Secundaria del municipio malagueño de Alhaurín de la Torre muestra "un uso problemático de Internet, conectándose a la red de forma compulsiva o adictiva", y refiriendo así "consecuencias perjudiciales en su bienestar personal, sus relaciones familiares y su rendimiento académico". Así lo ha dado a conocer el Ayuntamiento de la localidad del Valle del Guadalhorce en un comunicado en el que detalla que este dato se desprende de un primer estudio en relación a redes sociales y conectividad encargado por el Área de Servicios Sociales y que se ha llevado a cabo entre alumnos y alumnas de los tres primeros cursos de la ESO.
El estudio también recoge que el 7% del alumnado encuestado cumple criterios de un trastorno adictivo a las redes sociales, siendo la proporción algo mayor entre las alumnas, mientras que un 5% cumple criterios de un trastorno adictivo a los videojuegos, con una incidencia mayor entre los chicos. Asimismo, la proporción de alumnas que se conectan diariamente a redes sociales es de un 74% y la de los chicos un 59%. El estudio alerta además de que un número importante se conecta a redes sociales más de seis horas diarias e, incluso, los fines de semana más de ocho horas. Una mayoría reconoce dormir con el móvil en la misma habitación y uno de cada cinco se conecta a Internet después de medianoche.
La conexión a la red forma parte de la vida del alumnado del primer ciclo de la ESO de Alhaurín de la Torre, que hace un uso generalizado de Internet, las redes sociales, los videojuegos y otras aplicaciones. En muchos casos se implican de forma intensiva y en algunos casos se exponen a contenidos y actividades perjudiciales para su edad y desarrollo personal.
El uso problemático de las TIC se encuentra asociado a una mayor probabilidad de sufrir síntomas de ansiedad social y depresión. También se relaciona con un claro deterioro del sueño, del rendimiento escolar y con una mayor probabilidad de consumir alcohol y usar cigarrillos electrónicos. El uso compulsivo de Internet se encuentra claramente asociado a una mayor ocurrencia de síntomas de ansiedad social triplicando su probabilidad de ocurrencia entre el alumnado.
También se encuentra asociado a una mayor ocurrencia de síntomas depresivos graves, multiplicando su probabilidad de ocurrencia entre el alumnado de ambos géneros. El uso compulsivo de Internet se encuentra relacionado con una menor calidad y duración del sueño. Un 40% del alumnado con este tipo de uso duerme menos de seis horas al día, el triple que los que muestran un uso de menor riesgo.
Por otra parte, se relaciona con mayores dificultades de atención en la clase. Uno de cada tres estudiantes con uso compulsivo se duerme en clase la mayoría de los días y uno de cada cuatro estudiantes con este tipo de uso informa que tiene notas malas o muy malas (el triple que el alumnado en general). El uso compulsivo se encuentra también relacionado con una mayor frecuencia de acoso 'online'.
El estudio ha sido realizado por la Asociación Adiados, en el marco del programa 'Ciudades ante las Drogas' que realiza la Concejalía que dirige María del Carmen Molina. Se trata de una muestra de 562 estudiantes procedentes de tres institutos de Alhaurín de la Torre a lo largo del curso 2023-24.
En el mismo acto se ha presentado el programa de prevención del uso problemático de los móviles y las redes sociales 'PiensaTIC', que se desarrollará durante el curso 2024-25 en todos los centros de enseñanzas secundarias que lo soliciten.
Este programa que se basa en actuaciones de prevención universal a través de una aplicación web en la que todos los estudiantes pueden valorar los riesgos de su propio uso de Internet y aprender sobre ellos. Incluye también talleres presenciales con los docentes y los alumnos en los mismos centros participantes y un apoyo especializado a los equipos de orientación para la detección y abordaje de los problemas de adicción a las tecnologías.
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