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La Diputación de Málaga ha destinado 15,5 millones de euros para el desarrollo del programa Aqua Rural 5.0, una iniciativa que busca mejorar la digitalización del ciclo del agua en 71 municipios de la provincia con menos de 20.000 habitantes, de los cuales 24 se encuentran en la Axarquía. De esta inversión, 9,9 millones de euros provienen de una subvención obtenida a través del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (Perte), financiado con fondos europeos Next Generation, mientras que la Diputación aportará los 5,6 millones de euros restantes.
El objetivo principal de Aqua Rural 5.0 es optimizar el aprovechamiento de los recursos hídricos, especialmente en las localidades más pequeñas, donde la gestión del agua es un desafío constante. El presidente de la Diputación, Francisco Salado, ha señalado que un estudio realizado en 2023 reveló pérdidas significativas de agua en varios municipios de la provincia, "lo que pone de manifiesto la necesidad de mejorar las infraestructuras y la gestión para evitar el desperdicio de un recurso tan vital".
Este programa incluye diversas actuaciones destinadas a modernizar y digitalizar las infraestructuras hídricas. En los municipios de la Axarquía, que son especialmente vulnerables a la escasez de agua, "estas mejoras son cruciales". Los 24 municipios de esta comarca que se beneficiarán de esta iniciativa son Alcaucín, Alfarnate, Alfarnatejo, Algarrobo, Árchez, Arenas, Benamargosa, Canillas de Aceituno, Canillas de Albaida, Colmenar, Comares, Cómpeta, Cútar, El Borge, Frigiliana, Iznate, Macharaviaya, Moclinejo, Periana, Riogordo, Salares, Sedella, Totalán y La Viñuela.
Además de los 24 municipios de la Axarquía, los 47 municipios de la provincia de Málaga que también se beneficiarán del programa Aqua Rural 5.0 son Serrato, Montecorto, Villanueva de la Concepción, Yunquera, Villanueva de Tapia, Villanueva del Trabuco, Villanueva del Rosario, Valle de Abdalajís, Tolox, Sierra de Yeguas, Pujerra, Pizarra, Parauta, Montejaque, Monda, Mollina, Júzcar, Jubrique, Jimera de Líbar, Igualeja, Humilladero, Guaro, Genalguacil, Gaucín, Fuente de Piedra, Faraján, Cuevas de San Marcos, Cuevas Bajas, Cortes de la Frontera, Casarabonela, Casabermeja, Cartajima, Cañete la Real, El Burgo, Benarrabá, Benaoján, Benalauría, Benadalid, Atajate, Arriate, Alpandeire, Alozaina, Álora, Almogía, Almargen, Algatocín y Alameda.
En estos municipios, se instalarán contadores inteligentes con telelectura en captaciones y depósitos, lo que permitirá un monitoreo en tiempo real de los niveles, caudales, presiones y calidad del agua. Además, se implementarán sistemas de detección de fugas en la red de distribución, lo que contribuirá a un uso más eficiente del agua y a reducir las pérdidas. También se mejorará la eficiencia energética en las captaciones y bombeos de aguas potables, lo que no solo ayudará a conservar el agua, sino también a reducir el consumo energético.
El proyecto también incluye el desarrollo de un Plan de Sequía Provincial, que se centrará en los municipios con mayor riesgo de desabastecimiento, y la creación de planes directores de abastecimiento y saneamiento para dimensionar las futuras inversiones necesarias en infraestructura hidráulica. Además, se digitalizarán las infraestructuras hídricas básicas de cada municipio, creando un inventario georreferenciado de captaciones, conducciones y puntos de vertido, lo que facilitará la gestión y planificación futura.
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