Pelea entre padres en un partido de fútbol base en Fuengirola: el detonante, según la Policía, un insulto al árbitro

Pelea desatada entre padres en un partido de fútbol base que se disputaba este sábado en Fuengirola. El escenario del altercado, en el que ha tenido que intervenir la Policía Nacional, ha sido el estadio Santa Fe de los Boliches. Allí, los ánimos se caldearon y fueron varios los progenitores que llegaron a golpearse. A la llegada de los agentes, las familias que se habían enzarzado ya estaban separadas. Desde la Comisaría provincial aseguran que no se practicaron detenciones. Hubo forcejeos y agresiones, aunque de carácter leve, pero no hay constancia de que ninguno de los implicados tuviera que ser trasladado en una ambulancia a un hospital, según han informado a este periódico fuentes policiales.

La Policía habla de que el posible detonante del incidente, que ha adelantado ABC, fue un insulto proferido a un árbitro que un progenitor aféo. La tensión creció una vez que uno de los padres recriminó la agresión verbal, argumentando que en el lugar había menores presentes- La trifulca dio lugar a la suspensión del partido.

"Aquello era un caos"

Fuentes del Atlético Fuengirola, que se enfrentaba a la UD Fuengirola Los Boliches, han precisado a 'Málaga Hoy' que, desde que tuvieron conocimiento de la pelea, están intentando "recopilar información" sobre los hechos para analizar si debe "tomar decisiones". Los datos que hasta ahora maneja es que "un padre de Los Boliches increpó al equipo visitante". Tras ello, "se montó una revuelta en la grada", donde trató, sin éxito, de mediar uno de los entrenadores. "Pero aquello era un caos", aseguran dirigentes consultados.

Así las cosas, desde el citado club consultado advierten que estos episodios violentos "no pueden ocurrir en el fútbol base, pero menos aún en un derbi". La previsión que contemplan es que los directivos de ambos equipos mantengan una reunión para abordar el altercado. Este periódico no ha podido acceder a la versión de la UD Los Boliches.

En el lugar, la Policía informó a las partes de los pasos que debían seguir para proceder a denunciar los hechos en la Comisaría. Por el momento, no se tiene conocimiento de que ninguno de los implicados haya acudido para presentar el escrito.

Eran las 11 y media de la mañana cuando un aviso en el Centro de Coordinación de Emergencias 112 Andalucía alertaba de la pelea. El centro coordinador movilizó a la Policía Nacional, que se desplazó hasta el estadio para constatar lo ocurrido.

Cabe recordar, aunque en esa ocasión sin familias implicadas, las imágenes de un día de furia de aficionados ultras del fútbol en Málaga que hace dejaron la trifulca y los destrozos en el Mesón Segalerva, a pocos metros de La Rosaleda, y la estatua de Picasso en la Plaza de la Merced con una litrona de cerveza al lado y vandalizado con pegatinas de los ultras del Atlético de Madrid. Un fenómeno que en los años 80 y 90 del siglo pasado tuvo su pico, que se atenuó sin dejar de estar latente y que ahora vuelve a cobrar auge al calor de los radicalismos. Y son más visibles que entonces cuando cualquier altercado puede ser grabado por móvil por particulares que estén en esa zona. También por los propios protagonistas.

El partido de Copa del Rey entre el Marbella y el Atlético de Madrid, que debía ser una fiesta con 30.000 personas en La Rosaleda, quedó algo deslucido. Incluso dentro del mismo partido con insultos que partieron desde los ultras colchoneros y fueron repelidos por la afición local. Había un cuarto aproximadamente de hinchada atlética, de hecho el gol de Griezmann que decidiría la eliminatoria se cantó bastante. Vinieron muchas peñas de Andalucía para ver al equipo de la capital.