A prisión cuatro personas por cultivar y elaborar marihuana en viviendas de la provincia de Málaga
En los registros practicados fueron intervenidas casi 1.300 plantas, 10 kilos de picadura, 11 kilos de cogollos y 1 kilo de hachís
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La Guardia Civil, en el marco de la operación Tricam, ha desarticulado una organización criminal dedicada al cultivo y elaboración de marihuana, siendo detenidas cuatro personas y desmanteladas cinco plantaciones en interior.
La investigación se inició el pasado año cuando los guardias civiles tuvieron conocimiento de la existencia de una plantación indoor en una vivienda de la localidad de Alhaurín de la Torre, según han informado desde la Guardia Civil.
Tras las gestiones realizadas se pudo comprobar la existencia de una organización criminal de origen polaco que poseía varias plantaciones indoor en viviendas de varias localidades de la provincia de Málaga: Álora, Alhaurín de la Torre, Benalmádena y Casares.
Además, se habían enganchado ilegalmente a la red eléctrica con un sofisticado sistema que permitía que no constara ningún registro que acreditara su fraude.
También disponían de planteros donde probaban con distintas especies de marihuana a fin de obtener plantas idóneas para una mayor y mejor producción.
En los cinco registros practicados fueron intervenidas casi 1.300 plantas, 10 kilos de picadura, 11 kilos de cogollos de marihuana ya envasado, 1 kiklo de hachís y dinero en efectivo, entre otros efectos.
Finalmente, resultaron detenidos los cuatro integrantes de esta red por los delitos de pertenencia a organización criminal y contra la salud pública. A continuación, fueron puestos a disposición de la autoridad judicial que decretó el ingreso en prisión de todos los detenidos.
Desmantelados varios puntos de venta de droga en localidades del Guadalhorce
A finales del año pasado, la Guardia Civil detuvo a dos personas por la venta de droga, especialmente hachís y cocaína, dentro de la operación Torcal 329-Sinis 22 desarrollada en varias localidades del Guadalhorce, en concreto, en los municipios de Álora, Pizarra y Valle de Abdalajís.
La investigación se inició a principio de verano cuando los agentes detectaron como un individuo suministraba pequeñas dosis de cocaína a compradores de la zona en las cercanías de establecimientos de ocio de varias localidades.
Tras las numerosas gestiones operativas realizadas los agentes lograron identificar a las personas que estaban involucradas en la venta de droga, así como el método que utilizaban para su transporte desde la capital malagueña a los puntos de venta, que era realizado por una mujer que llevaba oculta la droga entre su vestimenta.
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