Un hombre que presenta un fuerte estado de agitación rompe la calma en Estepona. Lleva un cuchillo de grandes dimensiones, lo que provoca cierto revuelo entre los allí presentes. Unos policías acuden para tratar de calmarle. Intentan negociar con él, pero no lo consiguen y acaban siendo, al parecer, amenazados de muerte.

Los hechos ocurrieron sobre las 8 de la tarde este martes. Testigos alertan a través de varias llamadas a la Sala del 092 sobre la actitud de un hombre. Hablan de que una persona muy agitada y nerviosa porta un arma de grandes dimensiones. La Policía pide refuerzos. Tres patrullas participan en una persecución a pie que da comienzo por las calles del municipio cuando el individuo trata de escapar. En su huida, atemorizó a varios ciudadanos que encontró a su paso, según ha informado el Sindicato Profesional de Policías Municipales (Sppme) de Estepona a través de su perfil en redes sociales.

El presunto autor continúa a la fuga y, una vez llega a un callejón sin salida, es acorralado por los efectivos al final de una escalinata. Tras varios minutos "muy intensos", detallan las mismas fuentes policiales consultadas, lanza a los policías que intervienen "diversos objetos contundentes". Los agentes consiguen reducirlo, "sin ocasionarle lesiones" y entonces lo engrilletan, según la versión policial.

Más tarde, en el centro de salud al que había acudido, los médicos detectan que se trata de una persona con una enfermedad mental que, supuestamente, había dejado su tratamiento y había podido consumir algún tipo de droga. Así, fue trasladado, bajo custodia policial, hasta el Hospital Costa del Sol, en Marbella, siguiendo las indicaciones de los facultativos.

El sindicato de policías municipales ensalza la labor de los funcionarios para evitar que la situación fuera a mayores, y asegura que en la actuación no hubo que lamentar "civiles que sufrieran lesiones". Asimismo, subraya que tampoco el detenido ni los agentes resultaron heridos.

Policías disparan al pie a un hombre que se les abalanzó para atacarles con un cuchillo

El pasado mes de octubre, en otra tensa intervención, también un hombre fue arrestado tras abalanzarse, de madrugada, sobre unos policías con la supuesta intención de atacarles con un martillo y un cuchillo. Los agentes, que además habían sido recibido a pedradas, abrieron fuego, según defendió entonces la Policía, para repeler la agresión. La bala le alcanzó un pie. Tras la compleja intervención, el hombre, de 44 años, fue detenido por, presuntamente, intentar matar a los efectivos. También le atribuyeron otros delitos, como atentado a agente de la autoridad y amenazas. El presunto autor quedó poco después en libertad.

La actuación policial se precipitó tras recibir avisos de testigos que alertaban de que una persona estaba provocando daños en varios vehículos que se encontraban estacionados en una zona de aparcamiento de autocaravanas en la zona de Sacaba Beach.

Una patrulla acudió hasta Camino de la Térmica para comprobar lo sucedido. Allí localizaron a un individuo que, lejos de amedrentarse con la presencia de los policías, comenzó a lanzar piedras a los efectivos que iban a interrogarle sobre lo sucedido. No en vano, uno de ellos resultó herido, aunque de carácter leve, como consecuencia de la pedrada. A renglón seguido, el presunto autor, nacido en el año 80, atacó a los agentes. Fue en ese momento cuando, según las mismas fuentes policiales, uno de los policías sacó su arma reglamentaria y efectuó un disparo a fin de evitar el ataque, según su versión. El supuesto agresor tenía en su poder dos armas con las que iba a arremeter contra ellos.