Marina Cuesta, una figura destacada en la cultura de La Cala del Moral y referente artístico en el municipio

La Cala del Moral/Marina Cuesta, una joven artista de La Cala del Moral, es un activo cultural para el Ayuntamiento de Rincón de la Victoria. Su extensa carrera en el mundo artístico ha dejado una marcada impronta en cada rincón del municipio y en la ciudad de Málaga. Su participación en talleres municipales de arte, la creación de diseños para diversos carteles festivos del Ayuntamiento de Rincón de la Victoria, y su más reciente hito: el libro reflexivo e ilustrativo Oxígeno, entregado como muestra de gratitud al alcalde, testimonian el valor incalculable que aporta a la comunidad artística y cultural del municipio.

Cuesta, una joven apasionada por el arte desde una temprana edad, descubrió su amor por la expresión creativa a través del dibujo desde que era una niña. Inició clases de dibujo a los nueve años y continuó este camino durante ocho años. Aunque su objetivo inicial era estudiar publicidad, su rumbo cambió hacia la educación social debido a las presiones y expectativas externas durante su etapa de elección profesional a los 18 años. A pesar de este giro, la caleña no dejó su pasión por el arte, aunque disminuyó su práctica durante un tiempo.

Sin embargo, su verdadera revelación llegó cuando decidió explorar su faceta artística durante un período de oposición tras el confinamiento. Con más confianza en sí misma y una colección creciente de obras que la identificaban como artista, Marina decidió estudiar un Máster de ilustración en Granada, una experiencia que describe como el mejor año académico de su vida. Desde entonces, ha estado inmersa en la creación artística, participando en múltiples exposiciones individuales y colectivas, trabajando como freelance para empresas y entidades locales, y participando en mercadillos de artesanía.

Su libro Oxígeno surgió como un proyecto de reflexión personal. Cuesta siempre ha sido reflexiva y escribía sus reflexiones en sus notas. La idea de compartir estas reflexiones con el mundo la llevó a crear un libro que combinara textos y arte, utilizando los dibujos como una forma de expresar sus dos mundos: lo social y lo artístico. El título, Oxígeno, "simboliza la necesidad vital y liberadora de expresarse y soltar lo que se lleva dentro", explica la artista.

La inspiración de Cuesta suele provenir de los sentimientos y emociones. Sus obras, principalmente retratos femeninos, buscan reivindicar, mostrar emociones y realidades personales. Su enfoque en dibujar mujeres surge de su deseo de que las mujeres ocupen espacios destacados en el arte y en la sociedad en general, rompiendo con la invisibilidad histórica que han enfrentado.

"Me encanta que las mujeres ocupemos espacios, que seamos el centro, que se nos vea, que noten que estamos presentes en el arte y en muchas ramas en las que durante muchos años han estado ocultas. Ya no firmamos como anónimo, ya podemos firmar con nuestros nombres en mayúsculas", detalla la artista.

Una de las experiencias más desafiantes y personales para Marina fue su exposición individual Catarsis en la Sala Mare Nostrum en La Cala del Moral. Esta colección de obras digitales exploraba emociones menos "bonitas" como el miedo, la ira y el dolor, capturando la oscuridad y la realidad de esos sentimientos. A pesar de la dificultad de mostrar este lado oscuro, la caleña considera importante aceptar y mostrar esas emociones como parte de la realidad humana.

Escuela municipal y cartel de Navidad

La autora de Oxígeno, con experiencia previa colaborando en diferentes áreas del Ayuntamiento de Rincón de la Victoria, logró el respaldo inmediato para su iniciativa de crear una escuela municipal de arte y dibujo. Su gratitud es evidente hacia los trabajadores y concejales del municipio, reconociendo su apoyo continuo y elogió el excepcional trabajo que realizan. Este respaldo ha sido fundamental para llevar adelante su proyecto, mostrando la sólida colaboración entre la comunidad y sus autoridades locales.

Recientemente, Cuesta ha estado impartiendo talleres municipales de arte en su localidad. A pesar de ser profesora en otros ámbitos, enseñar arte era un desafío que asumió con confianza y entusiasmo. La experiencia ha sido enriquecedora para la artista, creando un ambiente acogedor y de aprendizaje para sus alumnos, donde se centran en crear sin preocupaciones externas.

Su participación en el diseño del cartel de Navidad para el Ayuntamiento fue otro desafío que enfrentó con creatividad. "Trabajar en colaboración con el equipo para capturar la magia de la Navidad y transmitirla a través del arte fue una experiencia gratificante", declara Cuesta.

Marina encuentra apoyo en su comunidad local, donde la cultura y el arte tienen un espacio importante. Reconoce el valor del apoyo de su entorno, aunque sabe que el éxito depende en gran medida del esfuerzo y la persistencia.

"La Cala del Moral respira cultura y arte", afirma la artista local, cuyo compromiso con la creatividad y el apoyo a la comunidad se refleja en sus palabras. Su presencia en mercadillos artesanales y eventos culturales revela una diversidad de talento en diferentes campos artísticos. Marina destaca la importancia de brindar visibilidad a estos talentos y valora profundamente lo artesano y creativo como pilares para fortalecer la identidad cultural.

Su enfoque orientado a motivar a otros a persistir en sus proyectos se refleja en sus consejos: "Seguir insistiendo si las cosas no salen a la primera, confiando en que alguien finalmente creerá en el proyecto". Además, Marina reconoce y agradece el sólido respaldo que ha encontrado en su comunidad, destacando cómo siempre han estado presentes apoyándola en cada proyecto.

A pesar de las limitaciones que siente como artista, especialmente en cuanto a la valoración y reconocimiento del arte, Cuesta sigue comprometida con su pasión. Reconoce la dificultad de vivir exclusivamente del arte, pero no descarta la posibilidad en el futuro. Su visión es disfrutar del arte mientras continúa explorando otras oportunidades profesionales.

Actualmente, la artista se centra en su escuela municipal de arte y sigue trabajando como freelance, manteniéndose abierta a nuevos desafíos y oportunidades que puedan surgir en el mundo artístico. Aunque se ha inclinado hacia el arte digital, está redescubriendo la importancia de las técnicas manuales y busca equilibrar ambas prácticas en su obra.

Con una mirada hacia el futuro, Marina Cuesta sigue comprometida con su arte y su desarrollo como artista multifacética, explorando diversas formas de expresión y crecimiento personal y profesional.