Ronda descorcha un nuevo vino monovarietal
Viticñultura
La bodega Lunares lanza al mercado Superluna, que llega con 1.100 botellas
La nueva referencia a base de uva graciano solo saldrá los años excelentes
Ronda, uno de los referentes en el vino andaluz tras la recuperación del sector y la creación de más de 20 bodegas de autor, descorchó la pasada semana un nuevo monovarietal que ha sido elaborado por la bodega Lunares, una de las veteranas. En concreto, se trata de un vino de alta gama del que tan solo se han elaborado 1.100 botellas y que está confeccionando únicamente a base de uva graciano que se recoge de las 2.500 plantas de esta variedad que posee la bodega.
Además, no está garantizado que salga de forma continuada al mercado, ya que tan solo si la vendimia de ese año reúne las condiciones de calidad que se han establecido se procederá a su elaboración. En este sentido, el responsable de la bodega, Pedro Morales, explicó que tras la primera añada de 2015 la de 2016 no llegará al mercado y la próxima en poder comprarse será la de 2017.
“Creo que es un vino que a la gente que está habituada a beber vino tinto le va a gustar”, dice Morales, que reconoce que se trata de un vino que no está destinado al público en general y que va dirigido a un público muy concreto. Además, la pequeña producción también hace que sea un reto asumible, ya que se trata de un monovarietal que cuenta con 18 meses en barrica y un mínimo de tres años en botella. Ello hace que se tenga que esperar un mínimo de seis años para poder salir comprarse.
Con un intenso aroma en su descorche el vino responde en boca como el monovarietal de graciano que es. No dejará a nadie indiferente. Un aspecto con el que ya cuentan sus responsables, que han situado a Superluna como el vino más alto en su gama. A ellos suman otros dos tintos, Altocielo y Lunares, además de las variedades blanco y rosado.
En cuanto a su precio, aquellos que quieran adquirir esta pequeña joya tendrán que pagar un mínimo de 30 euros. Además, debido a las pocas botellas de las que dispone de cada añada se tratará de una venta controlada para poder atender todas las peticiones que existen.
El mimo para elaboración de este vino en la bodega es equivalente al que se utiliza en el resto del proceso, ya que se trata de una recogida manual de la uva que se realiza de madrugada para evitar que le puedan afectar las altas temperaturas que suelen reinar en la zona durante la época de vendimia. Además, también se realiza un selección manual para quitar carga a la planta y posteriormente la recogida manual también permite seleccionar solo aquellos racimos que se encuentran en buenas condiciones para ser enviados a la bodega. No obstante, antes de proceder a la entrada se vuelve a realizar una segunda selección manual en mesa antes de proceder a moler la uva.
Un control llevado al extremo para la elaboración de Superluna. Y es que también la botella elegida es la primera de estilo borgoña con la que cuenta la bodega, a lo que se añade un sello de cera natural y una etiqueta sobre el cuello para señalar la añada a la que pertenece. Además, su entrega solo se realiza en caja de madera. De momento ya se trabaja en la posible ampliación del número de plantas que permiten la elaboración de este vino del que solo se producen tres barricas al año.
En cuanto al destino de este vino, como el resto de la producción, tendrá a Málaga, la Costa del Sol y la propia Ronda como principales destinos. Además, representa una pequeña cantidad de la producción total de la bodega, y es que son unas 50.000 botellas las que pone cada año en el mercado.
Este monovarietal que une a otros que ya se han elaboran en la zona y que han tenido un notable éxito, algunos de ellos con repercusión internacional, como es el caso del Pinot Noir de la bodega Cortijo Los Aguilares, un vino que cuenta con tres medallas de oro. A igual que Superluna también se encuentran en lo más alto de la gama de estas otras bodegas. También otras bodegas se han atrevido a elaborar vinos especiales como Descalzos Viejos o La Melonera, con Dimitri o Yo Solo, en su caso se trata de producciones limitadas y exclusivas para el restaurante Bardal con dos estrellas Michelin.
También te puede interesar
Lo último