Ronda al fin podrá decidir sobre su casco antiguo

Ronda llevará al próximo Pleno ordinario la aprobación definitiva del plan especial del conjunto histórico, penúltimo paso para que el Consistorio puede asumir la mayoría de las competencias en materia urbanística dentro del espacio protegido de la ciudad y decidir su futuro.

Una vez esté dado este paso será la Comisión Provincial de Territorio de la Junta de Andalucía la que tenga cinco meses para proceder a la aprobación definitiva, tras lo que la ciudad del Tajo tendrá una normativa de la que adolece y que obliga a que tengan que ser los técnicos de la delegación territorial de Cultura de la Junta de Andalucía los que informen de cada actuación que se quiera realizar en alguno de los inmuebles o calles.

"Vamos a dar seguridad y agilizar la tramitación", afirmó la alcaldesa rondeña, María de la Paz Fernández, tras anunciar que dicho documento sería sometido a la aprobación del Pleno. Un paso que supondrá dar vía libre a algunos grandes proyectos en la zona como la construcción de nuevo hotel de la cadena Catalonia en las instalaciones el antiguo colegio El Castillo, situado en pleno casco antiguo junto al Ayuntamiento rondeño.

El Ayuntamiento espera recibir la delegación de competencias más amplia posible, una medida con la que se espera poder reducir los plazos actuales para la obtención de permisos de obra y que oscilan entre los ocho y 12 meses.

Precisamente, los prolongados plazos para sacar adelante los proyectos es uno de los motivos que han llevado a que muchos edificios del conjunto histórico rondeño se encuentran en situación de abandono.

Ahora el Consistorio espera que se pueda reactivar la conservación de estos edificios e impulsar dicha área de la ciudad, aunque no todos los expertos en urbanismo coinciden en esa apreciación y algunos dudan de los beneficios que pueda tener la nueva ordenación.

Algunos arquitectos consideran que es una normativa excesivamente "encorsetada" destinada a favorecer viviendas para uso no turístico, algo que no terminan de ver viable dadas las dimensiones de muchas de ellas y los precios. "¿Quién quiere venirse a vivir a Ronda y comprarse un pseudopalacete para rehabilitar por varios millones?", se pregunta uno de los arquitectos consultados que prefiere permanecer en el anonimato. Y es que por esos precios aseguran que hay campos y mansiones en otros lugares disponibles.

A la espera de que el tiempo determine si la nueva normativa era la adecuada, lo cierto sí es que la ciudad contará con documento propio tras años de intentos que no llegaron a fructificar.

Además, en breve se iniciará la redacción del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que tendrá que resolver algunas de los grandes asuntos de la ciudad como los futuros crecimientos o el plan de movilidad que determine el modelo de ciudad y determine si avanza hacia la peatonalización que se imponen en muchas ciudades o se sigue premiando el uso del vehículo particular como en estos momentos.