Las lluvias de Semana Santa salvan la campaña del cereal
Almargen y Cañete la Real experimentaron un importante incremento de la producción
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La campaña recogida del cereal que encuentra a pleno rendimiento y en muchas de las zonas productoras ya entró en su recta final, por lo que se tienen datos avanzados de sus resultados. Una de ellas es la zona del Guadalteba, en la que muchos agricultores optan cada año por su cultivo. Es el caso de Cañete la Real, que tienen en esta actividad una de sus principales fuentes de ingreso.
Francisco Ponce, agricultor, ha explicado que la cosecha de cereal se encuentra aproximadamente a la mitad en el pueblo, por lo que la recolección se dará por terminada antes de final de mes. La producción será mayor que la temporada pasada, aunque los precios son más bajos. “Mi familia siempre se ha dedicado a la agricultura y la ganadería, y también tenemos una empresa que presta servicios a terceros para las diferentes labores que requiere el campo”, apuntó Ponce.
Por su parte, José Antonio Jiménez, gerente de la Cooperativa San Cosme y San Damián de Almargen, ha indicado que ya ha sido cosechado en torno al 80% del cereal que esperan recibir tanto de Almargen como de Cañete la Real. “Esta campaña será mejor que la anterior en cuanto a producción después del desastre de la temporada pasada a causa de la sequía. En estos momentos, la cooperativa ha recibido 10 millones de kilos de cereal (trigo duro, trigo blando, cebada, guisantes y habas) y se espera llegar hasta los 12 frente a los menos de 5 millones del pasado año. En cambio, los precios serán más bajos al haber mayor cosecha, aunque desde la cooperativa se trabajará para liquidar a los socios de la forma más alta posible”, explicó el gerente.
En la zona de Campillos también han tenido una notable mejora de la producción con respecto al pasado año. En su cooperativa esperan recibir unos 5 millones de kilos, una cifra muy superior al millón de kilos del pasado año. No obstante, según explicaba su responsable, Benito Avilés, esta cifra está algo por debajo de la media que suelen ser unos 6 millones de kilos. "Las lluvias de Semana Santa al salvado la cosecha", señaló.
Pese a ello, la medida por hectárea estuvo más baja que en las vecinas localidades de Cañete la Real y Almargen. En su caso han sido de entre 2.500 y 3.000 kilos por hectárea para el trigo y de algo más de 3.500 kilos por hectárea en el caso de la cebada.
Además, también se produjo un aumento del cultivo de guisantes que están destinados a la producción de pienso, con una media de unos 1.500 kilos por hectárea.
Mientras tanto, en otras zonas productoras como las campiñas de Ronda también se experimentó un incremento en la producción de cereales, aunque sigue siendo sobre un 20% inferior a las cifras que suelen registrarse en años sin que afecte la sequía.
"Probablemente, sea el año que menos producción tengamos en la zona, hay muchos agricultores que han decidido plantar este año matalahúga y garbanzos por los bajos precios de los cereales", explica Juan Carlos González, un agricultor de la zona y responsable de Agricultura en el Ayuntamiento de Ronda.
Allí las cosechadoras también están ya trabajando en la recogida del grano que espera poder defender este año en el mercado aunque, en general, cunde el pesimismo sobre tener mejores precios.
En general en Andalucía se podría decir que la campaña del cereal se "salvó" y que la producción estuvo cercada a la media habitual a pesar de que las precipitaciones han sido muy inferiores a las necesidades de este cultivo. "Este hecho se explica porque las lluvias llegaron justo en los momentos adecuados, en la siembra y primavera", explicó Juan Carlos González, responsable de cereales del grupo Dcoop.
Además, también se registró un comportamiento muy irregular entre las distintas provincias, algo que dentro de la propia Málaga también ocurrió. En este caso han sido las zonas más próximas a la costa como el Valle del Guadalhorce y las proximidades de Ardales donde se han registrado unos peores datos.
Bajos precios
Los aumentos de la producción han ido aparejados de un descenso de los precios, un hecho que Juan Carlos González asegura que debe a que en este momento se unieron el considerable aumento de la producción con respecto al pasado año y una menor demanda de cereales. Y es que el 75% de la cosecha se destina a la elaboración de piensos y las fábricas están teniendo una menor producción debido al abandono de las explotaciones ganaderas.
Por otro lado, el alcalde de Cañete la Real ha vuelto a mostrar el apoyo del Ayuntamiento y del municipio en general a las reivindicaciones de los agricultores tras las movilizaciones del sector de hace unos meses. En este sentido, Morón ha subrayado que estas reivindicaciones tienen el foco en una crisis que arrastra el sector desde hace varios años, ahora muy ligada a las medidas que quiere introducir Europa respecto a la sostenibilidad, lo que aumenta los costes de producción y disminuye, por tanto, los beneficios.
Morón, también agricultor y ganadero, ha añadido que “las medidas impuestas por la actual normativa no garantizan que los productos procedentes de terceros países que llegan al consumidor pasen determinados controles de calidad que aseguren que nuestra alimentación sea saludable y adecuada”.
Por su parte, Francisco Ponce ha lamentado que las movilizaciones no obtuvieran los resultados deseados, ya que además de las fuertes sanciones que recibieron muchos agricultores, el coste que los trabajadores del campo deben seguir asumiendo en cuanto a combustible o abonos continúa siendo muy elevado, mientras que los bajos precios, por ejemplo del cereal, siguen ahogando al sector.
Regulación de parques fotovoltaicos
Por último, el alcalde ha incidido en la necesidad de que las administraciones competentes trabajen para establecer mecanismos que permitan regularizar la implantación de parques fotovoltaicos, como el que pretenden crear en la vega de Cañete la Real. “Estamos a favor de las energías renovables, pero no de esta manera masiva e imperativa que no tiene en consideración los intereses de los ciudadanos de las zonas afectadas.
En este sentido, afirmó que "resulta preocupante que en los últimos días hayamos recibido información respecto a expropiaciones de terrenos de agricultores en nuestro término municipal". Por ello hizo hincapié en que "tanto nuestro paisaje como nuestro potencial agrícola y ganadero, patrimonio de Cañete la Real, están en peligro, y debemos seguir luchando para protegerlo y para evitar que nuestro entorno se convierta en un mar de placas que acabe con los recursos naturales y con el futuro de las próximas generaciones”, concluyó el regidor
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