Las obras del aparcamiento del barrio de San Francisco de Ronda comenzarán en septiembre

La alcaldesa de Ronda, María de la Paz Fernández, y el presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, han presentado los detalles del proyecto para la construcción de una aparcamiento disuasorio en el barrio de San Francisco una vez que su innovación recibió la aprobación definitiva en la comisión provincial de Urbanismo.

Fernández explicó que la intención del Ayuntamiento es poder comenzar las obras en el mes de septiembre, con una plazo de ejecución inicial de 18 meses y un coste de unos 5 millones de euros. "Es el proyecto más importante que vamos a desarrollar", dijo la regidora, que recordó que esta actuación era uno de sus grandes compromisos con los vecinos.

Además, la regidora agradeció el trabajo a los servicios técnicos de Diputación, señalando que "ha sido la innovación más rápida de la historia, han trabajado a saco". En este sentido, apuntó que "son iniciativas que hacen ciudad".

Por su parte, Salado, calificó de "momento histórico" para Ronda la aprobación de este proyecto, que considera que vendrá a convertir a la ciudad en una población "más amable" desde el punto de vista de la movilidad.

En concreto, el edificio contará con un total de siete plantas de las que tan solo dos serán visibles, y es que los técnicos de la institución supramunicipal han buscando su integración en la colina en la que se ubicará para evitar el impacto visual. Además, en el exterior se utilizará vegetación y materiales que imitan a colores naturales del entorno para suavizar su aspecto exterior.

Unas instalaciones en las que se dispondrá de 471 plazas de estacionamiento y una zona superior que ejercerá las funciones de mirador del conjunto histórico, ya que desde la zona existe visión directa del conjunto amurallado de la ciudad.

Además, las instalaciones contarán con equipamientos para la recarga de vehículos eléctricos y las paredes exteriores serán abiertas permitiendo la ventilación del edificio.

Por otra parte, Salado anunció que tienen previsto entregar a final de abril el proyecto de construcción de un vial alternativo al Puente Nuevo, una infraestructura llamada a posibilitar la peatonalización del casco antiguo de la ciudad.

Unos proyectos que en su conjunto supondrán un ahorro de unos 600.000 euros para las arcas municipales rondeñas, ya que la redacción de cada uno de ellos y la tramitación de las innovaciones correspondientes se han calculado en unos 300.000 euros cada uno de ellos.