Visto y Oído
Emperatriz
Vacunas
España avanza hacia la administración del pinchazo de refuerzo,ya está siendo inoculada a inmunodeprimidos y a todos los integrantes de riesgo del grupo 7 de vacunación, con cautela y algunas dudas sobre su eficacia a nivel de inmunidad. Hace unos días, un informe de expertos internacionales descartaba, por ausencia de datos, que esta tercera dosis mejorara las cifras en dicho sentido. Pero si en estos casos lo más fiable es remitirse a los hechos, un nuevo informe del Ministerio de Sanidad israelí, ha indicado que los niveles de inmunidad frente al coronavirus de quienes recibieron la tercera dosis de la vacuna de Pfizer son 10 veces más altos que los de aquellos que recibieron la segunda hace al menos cinco meses.
El estudio, publicado en el New England Journal of Medicine, mostró que el refuerzo de la vacuna redujo tanto la posibilidad de contagio como la de desarrollar síntomas graves de la enfermedad en quienes la recibieron (sobre todo en población mayor de 60 años). La investigación ha sido efectuada por universidades y hospitales entre un millón de pacientes a partir del mes de julio, cuando Israel comenzó a ofrecer la nueva inoculación con la vacuna de Pfizer-BioNTech.
La cantidad de casos de coronavirus registrados entre el grupo que no contaba con la tercera dosis durante el período de estudio fue cercana a los 4.500, mientras que entre aquellos que sí tenían el refuerzo de la vacuna solo se detectaron 934.
En cuanto a casos graves, la diferencia es aún más grande, con 294 casos graves identificados entre el primer grupo y tan solo 29 en el segundo.
Si las personas inmunizadas hace seis meses con las dos primeras dosis tienen la mitad de posibilidades de contagiarse con la variante delta que los no vacunados, los inyectados con la dosis de refuerzo solo tienen un riesgo de infección del 5%. Esto es, la eficacia de la revacunación se eleva hasta el 95%, equivalente a la ofrecida por la segunda dosis a las dos semanas de su aplicación, con la menos contagiosa variante alfa.
Los autores de este estudio advierten de que ''cuantificar la disminución de la inmunidad de la vacuna es fundamental para los responsables políticos de todo el mundo que se enfrentan al dilema de administrar vacunas de refuerzo''. Y es que, defienden que la caída de la inmunidad tras 6 meses desde la administración de la segunda dosis es significativa en todos los grupos de edades.
Este mismo lunes, sin embargo, se ha publicado este trabajo en The Lancet, que aboga justo por lo contrario. Y lo firman expertos de la OMS y de la propia FDA. Concluyen que, a día de hoy, no hay evidencias sólidas que justifiquen una tercera dosis para la población general.
El artículo revisa la evidencia disponible actualmente, tanto de ensayos sobre la efectividad de las vacunas como de estudios observacionales. Y concluye que su eficacia contra la covid grave es tan alta, incluso frente a la variante delta, que la dosis de refuerzo para la población general no es apropiada en esta etapa de la pandemia.
Explican que, "haciendo un promedio de los resultados informados en los estudios observacionales, la vacunación tiene una eficacia del 95% contra la covid grave, tanto de la variante delta como de la variante alfa, y más del 80% de eficacia contra la infección por cualquiera de estas variantes".
Por eso, los expertos son tajantes. "Tomados en su conjunto, los estudios actualmente disponibles no proporcionan evidencia creíble de una disminución sustancial de la protección contra la covid grave, que es el objetivo principal de la vacunación", señala la autora principal, Ana-María Henao-Restrepo, de la OMS.
Actualmente Israel encara una cuarta oleada de la pandemia y las autoridades han señalado en múltiples ocasiones que la inoculación de la población con la tercera dosis es fundamental para detenerla, en parte debido a la disminución en la inmunidad provista por la vacuna al cabo de algunos meses.
El sistema sanitario israelí ha inoculado hasta ahora con una dosis extra a cerca de tres millones de personas: una tercera parte de los habitantes del Estado judío y en torno a la mitad de su población mayor de 12 años. Sin embargo, los autores del informe también han advertido de que serán necesarios nuevos estudios para determinar la eficacia de la tercera dosis a largo plazo ante la variante delta u otras que puedan surgir en el futuro.
Mientras, los expertos de países occidentales debaten sobre la necesidad de aplicar esta tercera dosis. La FDA en EEUU, aprobó hace unos días la inoculación de la dosis de refuerzo a personas mayores de 65 años.Biden, por el momento, ha confirmado que él se inoculará una tercera dosis en cuanto sea posible hacerlo y lo permitan los expertos.
La OMS ha llamado a imponer una moratoria en la aplicación de la revacunación en los países más desarrollados mientras no se hayan alcanzado niveles mínimos de protección en los países pobres.
También te puede interesar
Investigación y Tecnología
¿Por qué hay personas que tienen la barriga redonda y cómo repercute en su salud?Investigación y Tecnología
Adicciones y salud mental: factores psicológicos clave para superar las dependenciasLo último
No hay comentarios