Málaga se tiñe de malva al paso de la Sangre

Capirotes color rojo y malva comenzaron a invadir calle Dos Aceras antes de las 20:15, la hora prevista de salida de la Archicofradía del Santísimo Cristo de la Sangre, María Santísima de Consolación y Lágrimas y del Santo Sudario. Se oía a lo lejos el repiqueteo de un tambor, los nazarenos más tardíos terminaban de colocar sus túnicas y los hombres y mujeres de tronos rezaban a los pies de sus titulares. Era justo en ese mismo instante cuando el tiempo se paraba al sonido de una campana y el ambiente enmudecía. Era el sonido anunciador de que la Archicofradía de la Sangre iniciaba su recorrido procesional un año más.

El Santísimo Cristo de la Sangre se reencontraba con sus fieles en la tarde-noche del Miércoles Santo luciendo una nueva cruz realizada por Manuel Toledano. Casi doscientas cincuenta personas lo portaban sobre sus hombros en un trono tallado en madera de cedro dorada en oro de 23 quilates. Realizado por Liébana en 1996, la obra aúna las principales características de los dos tronos procesionales que anteriormente tuvo el Cristo de la Sangre. Entre ellos, destacan los motivos vegetales del moldurón del cual sale un exuberante cajillo cuya frondosa decoración atrapa la mirada del espectador.

María Santísima de Consolación y Lágrimas siguió los pasos de su Hijo precedida de un amplio cortejo nazareno con túnica de terciopelo y capirote de raso malva que la ilumina en la noche del Miércoles Santo.

Entre las novedades que la archicofradía lucía esta Semana Santa se encontraban las ánforas del trono procesional de la Virgen de Consolación y Lágrimas así como una media luna realizada por Orfebrería Montenegro y la pintura del estandarte obra de Francisco Naranjo.

Durante esta jornada de la Semana Santa malagueña, la Agrupación Musical Vera+Cruz de Campillos y la Banda de Música Nuestra Señor de la Paz pusieron los sones musicales tras las imágenes de la Archicofradía de la Sangre, que fue la penúltima de la noche en pedir la venia en la Tribuna Principal. Luego lo haría Expiración para cerrar una jornada completa.