Perfil del asesino: así es el hombre que mató a una mujer en Jerez y la ocultó en un pozo

Buran Fouruzan, de 64 años y origen iraní, llevaba dos meses desaparecida cuando los agentes de la Policía Nacional encontraron su cuerpo en un pozo situado en una finca privada en la localidad gaditana de Jerez de la Frontera.

Desde que se le perdió la pista su desaparición había sido declarada de alto riesgo, llegando a pensar los investigadores, incluso, que alguien podía tenerla retenida contra su voluntad. La pista sobre su paradero vino gracias al testimonio de una vecina del detenido, que contó a los policías que la mujer tendría una relación con su vecino.

Cuando pusieron el ojo sobre él solo bastó seguirlo durante varios días para comprobar que el hombre frecuentaba la zona en la que se deshizo del cuerpo. Así es como lograron encontrar el cadáver de Buran, desmembrado y tapado con escombros y detener al autor de los hechos.

Perfil del delincuente

Se trata de Miguel, un hombre de 78 años con varios antecedentes penales que ya cumplió una condena de 15 años por haber matado a un conocido en Almería. Después de haber declarado dos veces ante la Policía y tras la reconstrucción del crimen, está previsto que hoy pase a disposición judicial.

Según las personas que conocían al presunto agresor, este hombre solía alardear de su pasado delictivo pero se había conseguido hacer un hueco entre sus vecinos jerezanos. Su mujer se separó de él porque la maltrataba a ella y a sus hijos, algo que confirman sus vecinos de entonces.

Al parecer en los últimos meses había conocido a Buran y le había ofrecido asilo ya que ella era una mujer con pocos recursos económicos. Parece ser que también podrían haber tenido encuentros sexuales esporádicos, pero no es algo que esté confirmado. Además de esto, Miguel acosaba a otra vecina con cartas en tono amoroso e incluso llegó a robarle prendas de su ropa interior.

Según la justificación que Miguel ha dado a los agentes, el móvil del crimen habría estado en que tuvo un arrebato provocado por unas desavenencias económicas. De esta forma acabó con la vida de Buran con un hacha, la descuartizó y ocultó su cadáver en un pozo de riego ubicado en un área rural de la localidad.

Ahora el detenido se encuentra en los Juzgados de Jerez de la Frontera, a donde ha sido trasladado en furgón a primera hora de la mañana desde los calabozos de la comisaría. Allí ha estado desde que el pasado domingo fue detenido. Está previsto que la jueza que instruye el caso lo envíe a prisión dadas las evidencias que existen sobre la comisión del delito y que ha sido el propio detenido quien ha confesado el crimen.

Según ha trascendido Miguel ha asegurado, en estos días, que no le importa volver a la cárcel e incluso ha dicho que se come mejor dentro de la prisión que fuera.

Cómo se conocieron

Sara, la hija de la víctima, ha contado a los medios de comunicación que su madre y Miguel se conocieron en un bar de casualidad. En ese momento Buran necesitaba empadronarse en algún sitio para recibir una ayuda económica, ya que era una persona en riesgo de exclusión social, pero no tenía domicilio.

Por este motivo quien luego se convertiría en su agresor le ofreció su vivienda. Sara ha desmentido que existiera un romance entre ellos. Este hecho es importante de cara a la investigación porque podría determinar si se trata de un caso de violencia de género o no.

Según ha explicado Sara, Miguel tenía intenciones sexuales con su madre pero Buran no, algo que lo puso algo violento.

Por el momento la investigación sigue abierta, especialmente a esperas de esclarecer si el móvil del crimen fue el que mantiene Miguel y si había una relación de algún tipo entre ambos para saber si el caso debe ser tratado por un Juzgado de Violencia de Género.