Análisis: Aspirador de Xiaomi Mi Vacuum Cleaner Mini

Cómodo y ligero pero potente. Es la carta de presentación del aspirador de Xiaomi Mi Vacuum Cleaner Mini, que ofrece prestaciones similares a las de los tradicionales aspiradores portátiles o de coche pero con un diseño mucho más cuidado y funcional.

Su motor, eléctrico y sin escobillas, cuenta con una potencia máxima de 30 AW, 88.000 rpm y una succión de 13 kPa (kilopascales) a máxima potencia y de 6 kPa en modo estándar.

Su batería de 2.000 mAh proporciona 30 minutos de funcionamiento en el modo estándar y nueve a máxima potencia. Para pasar de uno a otro basta pulsar el botón de encendido. Funciona sin cables y se puede cargar tanto enchufándolo a la red eléctrica como a una batería portátil del tipo power bank.

Es, como aseguró la compañía durante su presentación, ligero y cómodo en la mano (más que muchos aspiradores portátiles similares) y pesa solamente 500 gramos. Su diseño permite además llegar a rincones a los que no se puede acceder con otros electrodomésticos de la competencia (incluidas por ejemplo determinadas zonas del interior del coche).

Filtros y limpieza

Su sistema de filtrado cuenta con dos fases o capas: un filtro de malla de acero exterior que atrapa las partículas más grandes y un filtro HEPA interior, lavable, para capturar el polvo fino. Combinados, los dos filtros eliminan hasta el 99,97% de partículas de hasta 0,3 micras según indica la ficha del producto.

Si es cómodo usarlo, también lo es limpiarlo. Hay un botón en el depósito de suciedad que abre la tapa para vaciarlo en el cubo de basura y los filtros son extraíbles y lavables, lo que obviamente facilita su limpieza.

Mi Vacuum Cleaner Mini trae dos boquillas de limpieza que pueden usarse juntas o por separado. Una de ellas está diseñada para acceder a hendiduras y rendijas, como las del asiento del sofá o el coche. La otra, con cepillo, está concebida para aspirar de forma más rápida y eficaz la suciedad en las superficies, incluidos teclados de ordenador o salpicaderos de automóviles.

¿Merece la pena?

El aspirador es, como hemos dicho, muy cómodo de usar y su diseño permite llegar a todos esos sitios en los que los tradicionales trapos para el polvo (incluso muchos plumeros) solucionan poco y donde es además poco operativo (imposible, según los casos) emplear un aspirador doméstico tradicional.

La única pega es su batería. Para conseguir un dispositivo tan liviano Xiaomi ha sacrificado capacidad de batería y el modo estándar limpia pero, como es lógico, el que mejores resultados proporciona es el modo más potente. Y en esa opción la batería del Mi Vacuum Cleaner Mini dura solamente nueve minutos (exactamente nueve minutos), un tiempo que se antoja escaso.

Además, el aspirador no puede usarse mientras está cargando (ya sea conectado a la corriente eléctrica o a una batería portátil), y tener que enchufarlo cada nueve minutos y esperar a que se llene la batería es algo tedioso.

Con todo, es una opción interesante para esos rincones inaccesibles y para limpiar teclados de ordenador va muy pero que muy bien. Eso sí, mejor aprovechar ofertas (en Xiaomi son muy frecuentes, así que conviene echar un vistazo de forma periódica a su web) porque los 50 euros por los que se puso a la venta inicialmente en España son un precio elevado para este producto. Ojalá llegue en un futuro no muy lejano una reedición con mayor batería o que permita usarlo mientras se carga.

*El dispositivo ha sido cedido por Xiaomi para una prueba de 15 días