Ritmo y músculo para el Unicaja 2019/20

Análisis de la plantilla

La ya cerrada plantilla del Unicaja muestra un equipo al gusto de Casimiro con una importante inyección física

Base nacional con complementos y un único extracomunitario, el base Josh Adams, a falta del pasaporte marfileño de Deon Thompson

Casimiro posa en el Martín Carpena.
Casimiro posa en el Martín Carpena. / Javier Albiñana
Victor Miralles

27 de julio 2019 - 05:43

A mitades de semana, el Unicaja dio el empujón definitivo para cerrar la plantilla. El miércoles, el club anunciaba a Frank Elegar y el jueves a Melvin Ejim, fichajes números cinco y seis para poner la puntilla al grupo que dirigirá Luis Casimiro. Llegó también Francis Alonso, aunque el malagueño jugará este año cedido en el Montakit Fuenlabrada, quedando el equipo confeccionado a casi dos meses del inicio de la temporada. Un vistazo simple muestra algunos perfiles muy distintos a la temporada pasada y, ante todo, un ansiado músculo que se echó de menos en la 2018/2019.

En puestos exteriores, llega Josh Adams para ocupar el lugar dejado por Brian Roberts. Tras la apuesta fallida para intentar fichar a Sergio Rodríguez, el club tampoco entró al trapo por un Quino Colom que firmó por Valencia Básket y volvió a pescar en la G-League. De allí llega el base de 26 años, que esta temporada compitió en los Raptors 905, equipo asociado a Toronto. No obstante, cuenta con experiencia europea (Avtodor Saratov, Efes y Besiktas) y se espera que como base físico y rápido a campo abierto se complemente en la pareja de unos puros junto a Alberto Díaz.

En esas tareas de organización y ruptura aparecerá nuevamente como combo Jaime Fernández, convertido en referente del proyecto tras su importante renovación. Se espera mucho de él en su segunda temporada, como también se espera del único fichaje presentado hasta el momento, el serbio de 24 años Aleksa Avramovic, escolta puro anotador que llega del Pallacanestro Varese italiano, donde promedió 16.9 puntos y un 40% desde el triple. Suyo es el puesto que deja libre la marcha de Sasu Salin y firma con la esperanza de que explote definitivamente en ACB.

La principal revolución se vive en la pintura, con un interior más físico y menos tirador

Se mantiene una estructura semejante en el puesto de tres, donde Waczynski y Milosavljevic continúan con margen para ser tanto aleros como escoltas según las circunstancias. El polaco entra en su último año de contrato, mientras el serbio renovó por dos temporadas más. Salió Díez rumbo a Tenerife, al igual que Salin y Shermadini, y entra en escena uno de los cambios más relevantes: la inyección física de Melvin Ejim. No tenía el Unicaja un jugador del corte desde el play off que disputó Christian Eyenga, y es precisamente esa energía y potencia la que se espera que aporte el canadiense con pasaporte cotonou, que con 28 años y 2.01 metros actuará como tres grande y cuatro pequeño.

La gran revolución se ve en la pintura, donde Carlos Suárez y Deon Thompson parten como los ala-pívot fijos, aunque ambos tienen capacidad para ser cuatro y medio, rol del que careció el equipo la temporada pasada con Kyle Wiltjer como especialista exterior, con lo que tendrá que ser Melvin Ejim el que haga las veces de cuatro abierto en sus apariciones por el juego interior del Unicaja. Thompson, norteamericano pero también cotonou en cuanto juegue el Mundial con Costa de Marfil, fue una de las primeras operaciones del verano y firmó por dos temporadas destacando su versatilidad.

Aparecen, entretanto, tres pívot puros tras la última llegada de Frank Elegar. El cinco, neoyorquino pero también cotonou y de 2.08 metros, llegó al Unicaja desde el Tofas Bursa turco a sus 32 años para aportar principalmente cerca del aro, complementándose con el joven ucraniano (25 años) Volodymyr Gerun, que la campaña pasada se erigió como el mejor reboteador ofensivo de la Liga Endesa en el Cafés Candelas Breogán, con el que descendió. No se queda atrás el malagueño Rubén Guerrero, que parte como tercer pívot tras llegar de la NCAA en los últimos compases del año pasado. Tiene predisposición y apunta a ser más fiable que Viny Okouo, que acabó contrato.

En total, 12 jugadores y una base nacional conformada por Alberto, Jaime, Carlos Suárez y Rubén Guerrero a la que acompañan Waczynski y Milosavljevic junto a complementos –solo el base Josh Adams ocupará plaza de extracomunitario a expensas de que Deon Thompson juegue con Costa de Marfil– que deben aportar esa ansiada velocidad y físico que demanda Luis Casimiro. Tras las cesiones de Alonso y Rosa y a falta de concretar el futuro de Morgan Stilma, así queda el equipo. Con estos, pretemporada mediante, echará a andar el Unicaja 2019/20 el 24 de septiembre.

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