Fogg, McCallum y el ejemplo chino

Cuando se plantea cuándo puede volver la competición en el deporte, quizá China es el mejor ejemplo para tener una idea clara, al menos aproximada. La CBA se suspendió el pasado 30 de enero, cuando se vio que la expansión del coronavirus se había desbordado y estaba fuera de control, lejos de los límites de Wuhan. Fue taxativa, se paró la competición y se liberó a los jugadores para volver a sus respectivos países, sobre todo americanos.

Una vez controlada la epidemia, empieza a plantearse el regreso de la competición con la vuelta de los jugadores americanos. Sportando aseguraba que Ray McCallum y Kyle Fogg, ex jugadores del Unicaja, ya están en China para reincorporarse al Shanghai y al Beijing BeiKong. Todo ciudadano que regrese tendrá que estar 14 días en cuarentena, de hecho señalaba que Fogg había estado casi un día retenido al llegar, pero ya pudo entrar.

El ejemplo chino dice que la CBA se retomará el 15 de abril, dos meses y medio después de que se decretara el cierre. Por extrapolar, con todas las diferencias que puede haber entre China y Europa, en España la ACB decidió frenar la semana pasada. Parece complicado que para ese 24 de abril, por no decir el 11 de abril de la Eurocup, esté todo arreglado. Si se cumplieran los mismos plazos, estaría listo para finales de mayo, insuficiente para jugar todos los partidos de temporada regular en ACB. En el caso de la Eurocup también hay que tener en cuenta que el cierre de fronteras se ha aplicado en varios países y es previsible que extienda a más. Aunque la fórmula de resolver en una final a 8, incluso una Final Four entre los campeones de grupo del Top 16, está ahí.

Siguiendo con la analogía china, la temporada recomenzará el 15 de abril, todos los jugadores serán sometidos a cuarentena de 14 días y los jugadores que rechacen volver serán sancionados con tres años sin jugar en la CBA. Todos los partidos se jugarán en dos ciudades, Qingdao y Donguan, con cuatro partidos por semanas y todos los duelos a puerta cerrada. Fórmulas difícilmente aplicables en España, pero soluciones drásticas para acabar la temporada.

De fondo, los Juegos Olímpicos y el Preolímpico, que aceleró el final teórico de la temporada. La NBA, marcando un plan para acabar en julio o agosto, o el fútbol, fijando la final de Champions para el 27 de junio, van marcando un tanto la línea que se puede seguir en el baloncesto.