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Horario y previa del Unicaja - Asecco Gdynia

Con la clasificación para el Top 16 encarrilada, el Unicaja busca mejoría en su juego mirando al medio y largo plazo

El Asecco ganó los tres partidos que jugó a domicilio

Luis Casimiro, en el entrenamiento de ayer. / Unicaja B. Fotopress

La Eurocup mejora su nivel cada temporada, pero al Unicaja aún le da para salvar con bastante solvencia el trámite de la primera fase. Con cinco victorias, las que tiene tras seis jornadas, el pase está garantizado en alto número de casos. Con seis, si vence esta noche al Asecco Gdynia, no sería matemático pero sí virtual. En cualquier caso, las miras están más alto, más adelante. Y para llegar al Top 16 y, es de desear, a las eliminatorias con garantías hay que ahondar en la mejora del juego que se viene exhibiendo desde que comenzó la temporada. Se han ganado nueve de 14 partidos, nueve de los 12 últimos, algunos de mucha dificultad, pero hay un nítido camino de mejoría en el juego.

Llega por Málaga el Asecco Gdynia, que presenta unos números atípicos en el baloncesto europeo. Ha ganado sus tres partidos a domicilio y ganó sólo uno de los tres que jugó en casa. Allí ganó el Unicaja, pero le costó trabajo sacar el partido. Es un equipo con alto componente físico. Sus partidos se desarrollan en torno a los 70 puntos. No se ha movido mal ahí el Unicaja hasta ahora, pero ya está advertido de lo que ocurrió en la ida, en un encuentro que por momentos fue caótico y sin mucha cabeza.

Comparece el Unicaja sin Jaime Fernández y con Alberto Díaz. Es una lástima la temporada del escolta madrileño, con problemas físicos que le tienen entre algodones y rindiendo a un menor nivel del que acostumbró la temporada pasada. Aprieta los dientes, pero su talón le hace rabiar de dolor y tiene que parar. Se le ha cambiado el tratamiento y, aunque parece complicada una solución definitiva sin el quirófano, se aguarda a que pueda echar la temporada aunque haya que criogenizarlo y dosificarlo. Es de esos jugadores capitales en la estructura del equipo, pero pueden venir bien estos encuentros de Eurocup, si se consigue la clasificación, para que otros compañeros cojan la bandera. Por ejemplo, un Toupane que está rindiendo bastante mejor en competición europea (máximo anotador del equipo) que en ACB. Ocurre lo contrario con Josh Adams, más brillante en competición doméstica.

Tiene el Unicaja unos números algo mejores ofensivamente en la Eurocup que en la ACB, con mejores porcentajes de tiro, aunque con ese 33% raspado en triples que en la Liga española baja hasta el 31%. Se refería Casimiro ayer a ese caballo de batalla y por ahí va la idea de seguir construyendo una estructura de juego que sea capaz de generar mejores tiros y que jugadores con porcentajes anteriores por encima de ese tercio de acierto se eleven desde cifras poco usuales en el baloncesto profesional para tiradores habituales. La sensación generalizada dentro del club es que se realiza un gran trabajo y que acabará saliendo en el transcurso de la temporada. Y se trata de ir sembrando, en partidos como el de esta noche que, sobre el papel, no tienen un gran atractivo

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