El Unicaja va a la Minicopa con su generación más alta

Con tres jugadores por encima de 1.90 y sólo dos por debajo de 1.80, el equipo de Manolo Bazán, que dirige por 12ª vez en el torneo, va con gran ilusión a Badalona a competir en un grupo muy difícil

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La plantilla de la Minicopa

El Unicaja infantil se prepara para la Minicopa
El Unicaja infantil se prepara para la Minicopa. / Javier Albiñana

Pronto se cumplirán 20 años del inicio de la Minicopa ACB. Fue en 2004 cuando en el Pabellón de Arquitectura de Sevilla apareció un tal Ricard Rubio que embriagó a todos los que le vieron. Año y medio después estaba debutando en ACB de la mano de Aíto en el Joventut. Desde entonces, más de un centenar de jugadores que jugaron esta competición de jugadores infantiles debutaron en la Liga Endesa. Algún estreno fue simbólico, pero muchos hicieron carrera, son campeones del mundo, de Europa o medallistas olímpicos.

En la cuna del baloncesto catalán y español, Badalona, está el Unicaja como uno de los ocho equipos en la gran fiesta del baloncesto de base. Se ganó en una brillante fase previa de Valencia su participación en el torneo y los chicos de Manolo Bazán quedaron encuadrados en el grupo B, junto al Barça, Gran Canaria y Joventut; precisamente jugarán con el anfitrión el primer compromiso, miércoles 15, a las 16:45 horas. Abrirán la jornada del jueves los malagueños ante Gran Canaria (9:30 de la mañana), mientras que el enfrentamiento contra el Barça se disputará el 17 de febrero, a partir de las 11:45 horas.

Bazán es el técnico más experimentado de la Minicopa. Es su 12ª edición al frente del equipo. Por sus manos han pasado los mejores chicos de cantera en los últimos 15-20 años. Mario Saint-Supéry, Rubén Domínguez (debutaría en ACB con el Estudiantes y fue el primer jugador que jugó tres ediciones, todas con el Unicaja), Lucas Muñoz, Pablo Sánchez (la jugó con el Betis como invitado antes de llegar a Los Guindos), Ignacio Rosa, Domantas Sabonis, Luis Conde, Alberto Díaz y Pepe Pozas forman en elenco de canteranos cajistas que han debutado en la élite tras jugar esta competición. Rubén Vicente jugó también una fase previa, pero el equipo no se metió.

El técnico gaditano explica las características de su equipo. "La generación es bastante alta, de las que más hemos tenido. Quizás faltas algunos jugones más pequeños que hemos tenido otros años, pero la verdad es que es bastante alta para lo habitual. Tenemos a cuatro jugadores de primer año que van a tener minutos en esta Minicopa, algo que no es muy frecuente en la competición, pero tal y como está confeccionado el equipo tendrán protagonismo", explica Bazán, que tiene en su equipo tres jugadores ya por encima del 1.90 y sólo dos por debajo del 1.80. Recuerda que la fase previa fue "más fácil de lo esperado inicialmente. El primero fue muy bien, el segundo, ante Girona, más igualado en el primer tiempo y nos despegamos en el segundo y en el tercero, teóricamente el más complicado ante Tenerife, entramos al partido muy bien, nos fuimos de 20 y no les dejamos entrar".

"Los dos grupos son muy difíciles, hay ocho equipos y todos están bien", señala el técnico cajista sobre el sorteo, que le ha deparado duelos ante grandes canteras: "Están todos muy reforzados, todos tienen jugadores extranjeros, hay cuatro con africanos. La Minicopa se está convirtiendo en ir a competir y a ganar más que formar, cada día hay más nivel. El Joventut, por ejemplo, no había cogido a extranjeros nunca y este año sí. El Murcia tiene al MVP de la fase previa Minicopa, Gran Canaria tiene dos invitados, un extranjero y uno de Baleares, Valencia tiene un extranjero francés suyo y un chico de Baleares, el Madrid tiene un 2.09 y un 2.11, con lo que ese condiciona en estas edades, más allá de si son mejores o peores... Se pueden llevar dos invitados, dos nacionales o un nacional y un extranjero". El Unicaja tiene como invitado al base Alejandro Montenegro, un joven de Algeciras que es de primer año.

Bazán, que llegó a tres finales con el equipo malagueño, explica cómo ha cambiado el seguimiento de la competición desde las primeras ediciones. "Antes ibas allí, ni los padres veían los partidos, apenas había vídeos... Ahora los niños terminan y tienen sus estadísticas, sus highlights... Eso ha cambiado muchísimo. Lo primero que hacen al acabar el partido es coger el teléfono y ya sabes a lo que van. Pero es parte de la educación de esta generación, tampoco creo que les afecte mucho".

"Jugamos un torneo en octubre en Alcalá del Valle, le ganamos al Gran Canaria por 30, pero tiene un chico nuevo y dos invitados, es un equipo distinto. Con el Joventut perdimos por siete después de todo el partido muy igualado, pero también tienen refuerzo, un extranjero de 1.95. Seguramente sea bueno conociendo cómo trabajan allí", apunta Bazán sobre las referencias con rivales.

Por último, el entrenador de Algar, que fuera también canterano de Los Guindos, reflexiona sobre cómo evoluciona también el baloncesto de base. "El cambio se produce sobre todo físicamente, los niños cada vez son mejores. La estatura cambia, aunque la tendencia es que sean más altos, pero hay generaciones más alta o más bajas. Lo que sí se ve es que cada año son más fuertes. Antes era muy raro ver a un infantil meterla para abajo. Ahora en el equipo tenemos a unos cuantos que lo hacen, igual en los demás. La evolución es que los niños son más grandes, más fuertes y más rápidos", finaliza.

La plantilla

Bases: Alejandro Polo Pinto, Alejandro López Guerrero y Alejandro Montenegro Moya.

Escoltas: Gonzalo Nuño Castro, Daniel Sierra Velasco, Ricardo Berrocal Ortega, Antonio Jesús Martínez Fernández y Elías Ibadín Sánchez.

Aleros: Miguel González Díaz, Marcos Montes Camacho, Oliver Díaz Fernández y Sergio Arroyo Cervera.

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