MoraBanc Andorra-Unicaja: Una curva pronunciada (20:45)

Complicada salida a Andorra, rival que lleva cinco derrotas seguidas pero que ha competido en los últimos encuentros y que en su casa mejora su rendimiento y encuentra soluciones

Tyson Pérez, contacto directo

Tyler Kalinoski y el efecto Jean Montero

Kendrick Perry levanta pesas.
Kendrick Perry levanta pesas. / Unicaja B. Fotopress / M. Pozo

El peligro acecha en cualquier curva en el calendario. En Andorra aguarda al imperial Unicaja de las ocho victorias en ACB un rival que acumula cinco derrotas seguidas, con cierto engaño. Las tres últimas fueron a domicilio. En los cuatro últimos duelos perdió tres por cuatro puntos o menos y el otro fue un notable partido en el WiZink en el que compitió hasta el final con el Real Madrid. Natxo Lezkano no podrá contar con Chris Czerapowicz, Tyson Pérez, cedido por el Unicaja, ni tampoco con Stan Okoye.

Tiene bajas el cuadro pirenaico, pero no ha dejado de competir. Y poco a poco se ha hecho con las riendas del equipo el talentoso Jean Montero, que este verano estuvo en alguna configuración de plantilla cajista cuando se planteó la posibilidad de que saliera Saint-Supéry. Se desechó y se optó por seguir con el canterano. Se enquistó su continuidad en Gran Canaria y, con la Liga empezada, llegó a Andorra. No ha tardado en coger las riendas. Números de MVP la pasada semana y promedia 14,2 puntos, 4,3 rebotes y 3,2 asistencias para 15,5 de valoración. El perímetro cajista tendrá trabajo fino con el caribeño. Junto a él está un canterano cajista, Rafa Luz, pasada la treintena ya y que el año anterior apostó por bajar a LEBy regresar a la ACBpor la puerta grande. Y Jerrick Harding, del que se espera mucho, roza la decena de puntos mientras se va recuperando. Interesante también la temporada del pívot croata Marin Maric (12,3 puntos, 5,1 rebotes, 13,8 de valoración).

Del Unicaja se habla en el baloncesto nacional, se ha recuperado el respeto hacia él de los demás equipos, lo cual también tiene una vertiente negativa, que los rivales salen con el cuchillo entre los dientes y una victoria luce más. Más allá de la necesidad intrínseca de cada partido en la Liga Endesa, donde hay exigencia y nivel. El equipo está en unos grados de confianza muy difíciles de prolongar en el tiempo. El juego tiene cada vez más picos altos prolongados y menos valles, pero hay que estar preparados para bajones de ciertos jugadores que no pueden estar toda la temporada a tope. Es algo que tiene presente el staff cajista, pero otros también deberán elevar su rendimiento. Las rotaciones en partidos de BCL permiten en esta primera fase descargar. Fue bueno constatar que Saint-Supéry fue uno más en la rotación con 20 minutos ante el Falco, se puede tirar de él también en partidos de ACB. A Lima aún le falta un poco.

Ya metidos en diciembre, quedan dos meses para la Copa y un mes largo para el inicio del Round of 16 de la BCL. Hasta entonces, sólo la Liga Endesa. Un buen momento para seguir llenando el granero de victorias y mirar hacia arriba.

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