Plaza: "El viernes hay que hacer un infierno"

Málaga/Joan Plaza está a un triunfo de distancia de dirigir por segunda vez al Unicaja en una final. La primera, la Supercopa de 2015, apenas se acerca en importancia a la que sería la tercera para Plaza en la Eurocup, después de hacerlo con el Madrid y el Cajasol, ahora Betis. Hará falta esfuerzo, compromiso, talento... y los decibelios del Carpena. "Es muy importante que el viernes hagamos honor a lo que hablamos, de hacer un infierno nuestra cancha. No se entendería que hubiera un solo asiento vacío", señaló el catalán.

Porque el segundo choque de la semifinal ante el Lokomotiv Kuban "es una oportunidad para nosotros, para la historia del club", aunque entiende Plaza que "no hay nada hecho". Una opción, con el Carpena engalanado, de que el Unicaja vuelva a pisar una final, en este caso continental, siempre y cuando sea capaz de dejar de lado el cansancio acumulado: "No vendrán jugadores, vendrán bestias el viernes y necesitamos sacar fuerzas de donde sea para recuperarnos".

Porque al equipo le toca de nuevo "un viaje muy duro" después de "unas semanas bonitas pero difíciles". Recordó Plaza, además, que su rival acudía ayer al encuentro tras "diez días de descanso" por el parón en su competición doméstica.

El técnico del Unicaja señaló estar "muy satisfecho" por un triunfo que llegó sin Suárez, aquejado de una gastroenteritis: "Ha sido un golpe bajo". Sin el capitán, el equipo se multiplicó para aunar fuerzas, más si cabe con la lesión en el tobillo de Dejan Musli. "La lesión no nos ha ayudado para nada. Entonces hemos sido todos capaces de dar un poco más y suplir sus bajas, hemos bajado el culo, hemos apretado en defensa y hemos ayudado en el rebote", argumentó.

Plaza incidió en que "ganamos tres cuartos y la batalla por el rebote", aunque también señaló el plano negativo: "Hemos perdido balones de más, algunos consecutivos que nos hicieron mucho daño". Afortunadamente, el Unicaja se recompuso para obrar una victoria que para Plaza tenía dedicatoria. "Hay que dedicárselo a la gente que cree en el equipo, que cree en el staff, que cree en mí y que cree que este club puede y debe vivir momentos especiales", especificó un Plaza que terminó haciendo un nuevo llamamiento al cajismo: "Hemos de hacer que el viernes eso sea una olla a presión. Con su ayuda y nuestro trabajo hemos de jugar una final que nos apetece mucho y muchos no creían".

Por su parte, Obradovic, técnico local, hizo hincapié en que "probablemente el gran parón nos hizo mentalmente no estar preparados para el partido", ejemplificado en varias situaciones: "Fallamos muchos tiros abiertos y perdimos el ritmo". Pese a todo, el del Kuban confía en dar la vuelta a la eliminatoria: "Sólo es el primer partido y tenemos que olvidarlo lo más pronto posible. Iremos a Málaga a hacerlo lo mejor que podamos y regresar a Krasnodar para el tercer partido".