Álvaro Folgueiras: Momento de locura en Cleveland
El malagueño debuta este viernes en la March Madness, torneo final universitario
Su camino en el torneo

Álvaro Folgueiras vivirá este viernes su estreno en el torneo final de la NCAA. Una experiencia para todo jugador que emprende la aventura americana. El anterior y único malagueño que llegó a esa instancia fue Francis Alonso. Jugará en Cleveland ante Alabama, equipo potente que parte con todo el favoritismo, pero Robert Morris llega en buena dinámica y con el paleño convertido en jugador de referencia en su conferencia. Y con muchos ojos encima, el torneo final arrastra más audiencia en sus picos que la NBA.
"La verdad es que lo que estamos viviendo es increíble, es un premio a una temporada con muchas dificultades que se han ido dando, pero muy contento por mi resultado personal y, sobre todo, por el equipo. Este título es muy especial. Vengo de un contexto en el que el año pasado ganamos sólo 10 partidos, se hablaba mucho y se dudaba un montón de nosotros. Soy el único jugador que se queda en el roster del equipo y pasan ciertas cosas que hacen que el proyecto y el equipo esté donde está ahora mismo. Muy contento por todo", explicaba el malagueño sobre este proceso en el programa de Twitch de la Federación Española de Baloncesto: "Estamos haciendo historia y esto no ha acabado, hacía 10 años que Robert Morris no se metía en el torneo final. La historia se escribe día tras día y de eso somos más que conscientes. Llevamos 16 victorias de 17 partidos jugados y estamos en un gran momento de forma como equipo, hemos aprendido de la derrota, estamos a un nivel de entendimiento y camaradería que hace de esto mucho más que un equipo".
Los números de Folgueiras, promediando casi un doble doble, han llamado la atención aunque la Horizon League no esté entre las conferencias en teoría más potentes de la competición. "Es verdad que me lo estoy poniendo cada vez más difícil y de eso se trata un poco, pero hay que valorar este momento deportivo. Estoy muy contento por poder aportar a mi equipo lo máximo posible y de seguir aprendiendo y mejorando, esta vez desde la victoria. Muchas veces se trata la victoria como esa alfombra que pones por encima del polvo y que tapa todo lo malo que puedes estar haciendo. El equipo está muy bien, pero puede seguir haciendo las cosas mejor y en esa etapa. Es la mentalidad. No hay que olvidar un poco de dónde venimos, de qué trayectoria llevamos. Así que hay que valorar el momento y disfrutar de lo que viene, simplemente", reflexiona el malagueño.
Acerca de las diferencias con el juego europeo, Folgueiras señala que "la rapidez de juego es otro estilo. Es verdad que igual la calidad en conceptos y en lectura no es tan buena como a la que estamos acostumbrados en España y sobre todo en los veranos con la selección, pero la rapidez de juego y la fisicalidad es algo a lo que tienes que adaptarte para jugar. Si no te has adaptado, la selección natural se encarga de quitarte el medio rápido, así que no hay más remedio", decía el ala-pívot, que también reseñaba cómo es la vida en Estados Unidos: "Muy ocupado, pero también te digo que en España estaba más. Al final yo en Málaga iba al colegio seis horas, entrenaba tres y tenía que coger el coche en media hora de ida y media hora de vuelta y después estudiar. ¿Qué te quedaba? Absolutamente nada. Aquí voy a clase hora y media, entreno, dos horas físico y me quedo tirando media hora más. Llego antes al entrenamiento, pero tengo la tarde para mí. Vine con 17 años y tengo 19, tengo que mejorar en todo, destacaría principalmente una evolución física, creo que puede evolucionar mucho más. Y sobre todo el tiro. El tiro yo creo que en mi juego lo ha cambiado un montón. Antes, en vez de darme medio metro como me dan ahora, me daban mucho. Y bueno, en ese primer paso de uno contra uno, de derrotar a tu defensor, pues me ha ayudado bastante. Buscaba un sitio donde el desarrollo de los jóvenes sea la prioridad. Y bueno, yo creo que esos objetivos se han cumplido, que mi evolución sigue su curso. Muy contento por la decisión que tomé hace tres años y por cómo se ha ido".
Sobre lo que hará la próxima temporada, Folgueiras dice que "no me gusta pensar mucho en el futuro, crea algo de ansiedad. Y no estamos para eso. O sea, ahora mismo creo que mi presente es lo suficientemente ilusionante como para ponerme a pensar otras cosas. Y nada, a disfrutar el momento y bueno, lo que tenga que venir, vendrá y tomaré una decisión con mi equipo si es oportuno", asegura, al tiempo que valora cómo asume los elogios: "Siempre gusta, no nos vamos a engañar. Pero hombre, después está mi trabajo que lo leo todo y mi familia también. Y me intenta mantener humilde. Y a veces se necesita que llegues a tu casa después de estar ocho meses fuera y te diga tu madre, 'recoge el cuarto, que eres tonto'".
En Cleveland estará Nacho, hermano de Álvaro y que fue quien empezó a jugar al baloncesto. Ahora está en Irlanda. "Le hice la promesa a mitad de temporada, sigue absolutamente todos mis partidos, me escribe después de cada partido. Está siempre súper pendiente de mí, como hermano mayor, intenta un poco cuidarme. Le dije que estábamos ganando, que esto no es como el año pasado. Me calenté y le dije que si íbamos a la March Madness le pagaba el billete. Y el tío guardó el mensaje. El otro día metí un triple, íbamos tres arriba, quedaba un minuto y medio, y fui a la cámara y puse la mano así, y dije, 'Nacho, te vienes'", bromeaba el malagueño, que tendrá a su familia y parte de El Palo pendiente este viernes.
Después, el reto de jugar el Europeo sub 20 con la selección española. "El verano es una experiencia única, la verdad. Juntarte con gente que conoces desde los 12 años y con los que te escribes asiduamente y compartes sueños, compartes también el día a día, una realidad y muchas cosas con ellos, pues es súper especial. Sé que en la selección el objetivo cada verano es el oro, y yo todavía no me he llevado ninguno, así que espero que este verano en Grecia haya una buena selección y ya estamos hablando de eso", cerraba como deseo el malagueño. Pero antes, la locura en Cleveland.
También te puede interesar