Augusto Lima, político por un día

Curiosa salida la que ha encontrado Augusto Lima, de momento coyuntural porque alargará su carrera como jugador de baloncesto. El brasileño participó este viernes en una mesa redonda organizada por el Partido Popular, junto a Alberto Núñez Feijóo y Juanma Moreno, entre otros acompañantes, dirigida a las Nuevas Generaciones del PP, con el pívot brasileño de gancho y prototipo para el fin de ese acto, celebrado en el salón de un hotel en Torremolinos. 'La Europa de los retos', donde se abordaron temas de emprendimiento para los más jóvenes y una evaluación de la situación actual (empleo, vivienda o educación) y hacia dónde se encamina el futuro, con Lima hablando de sus experiencias personales en un tono distentido y desenfadado, mientras el presidente nacional del PP y el de la Junta establecían diálogos con el resto de acompañantes de la mesa. Presencia significativa, además de in situ, porque el físico del carioca impacta, el ver a un jugador de baloncesto en activo y no ha existido, al menos públicamente, una manifestación de Lima de querer acercarse a ese mundo. Pero sí reconoció que su lesión de rodilla le cambió el concepto de cosas. "Cuando pasan tantas cosas duras todo lo que venga es una maravilla. La vida cambia mucho en todo este tiempo, la manera de pensar y todo, pero vuelves a revivir. No le di vueltas a la jugada en que me lesioné. Fui cabezón, porque me lesiono en la primera jugada y sigo jugando, pero también pensé que era mejor eso que un parcial, por cómo caí podía haber sido peor. Caí, sabía que me había roto y sabía que iba a empezar. Quiero ser agente o director deportivo cuando termine mi carrera. Sigo pendiente de mi rodilla", explicaba Lima hace unos meses en Cope Málaga. Cumplirá 33 años en septiembre.

Alguien importante en el engranaje del vestuario del Unicaja y el constuir esa identidad, para eso volvió a Málaga en 2022. Se asumía su marcha del Unicaja, al igual que Will Thomas, dos huecos de difícil reemplazo en lo humano. Ibon Navarro siempre destacó públicamente esa labor y la paciencia con su proceso. Se hizo esa famosa inversión con él y su rodilla, pero es deporte de élite y hay que tomar decisiones, aunque se va con el cariño del club y aficionado. Los equipos de Lima siempre sumaron títulos o rompieron su techo. Algo tendrá el brasileño en ese trabajo fuera de la pista, funciones invisibles que son necesarias en un grupo humano. No es oficial aún, pero se da por hecho que jugará en Leyma Coruña, precisamente de la tierra de Núñez Feijóo.

Perry, Taylor y Thomas, juntos de vacaciones

Kendrick Perry, Kameron Taylor y el ya retirado Will Thomas coinciden en Estados Unidos de vacaciones, a menos de un mes para que el Unicaja 24/25 eche a rodar. Imagen que se compartía en redes sociales, junto al pívot estadounidense y de pasaporte húngaro Mikael Hopkins (1993), de Maryland, al igual que Kam Taylor, y que coincidió con Perry en el Cedevita durante su etapa en Eslovenia, ahora en el Enisey de Rusia. Una afinidad muy potente creada por los jugadores americanos del Unicaja, en esa foto falta Tyson Carter, que recientemente publicaba un vídeo ejercitándose en la academia del exNBA Paul Millsap, o Dylan Osetkowski. Habitual que durante la temporada en Málaga, los estadounidenses se reunían para hacer planes, crear química, cada uno con una personalidad diferente y dando como resultado ese cóctel perfecto, que se ha insistido mucho desde el Unicaja, relación a lo que luego se transmite en la pista. Paradójicamente no es un vestuario de grupitos, por desgracia una tendencia en Los Guindos antes de concebir el proyecto actual, donde el factor humano quedaba a la par del encaje deportivo. Como consecuencia, un grupo extraordinario, que también trata de coincidir en verano y seguir puliendo esas relaciones. Ya no estará Will Thomas, dejará un vacío el de Baltimore pese a un carácter introvertido, nada que ver en las distancias cortas.

Trató de convencerle Perry para que siguiera una temporada más. "Nos enseñaste a ganar", mensaje potente de Ibon Navarro en referencia a Thomas. Pero en Málaga queda un bloque con un nivel competitivo por las nubes. Tendrán que dar el paso otros para ocupar ese espacio, de líder con el ejemplo, proporcionar esa vitamina para que la llama del hambre no se apagara, como hacía el tío Will, muy carismático por otra parte. Y Kameron Taylor, con su futuro atado hasta 2027, en su segunda temporada en Málaga. La primera dejó un sabor de boca muy agradable, pero tiene margen de crecimiento en esta estructura malagueño. No se separan los colegas. Y será buena señal seguir viendo imágenes de este tipo.