¿Hacia un cambio de paradigma?

El Barcelona anunció la salida de Sarunas Jasikevicius para darle la alternativa a Roger Grimau, técnico de la casa al que el Unicaja se ha enfrentado repetidamente en los últimos años en torneos de categoría inferior. Aún no es oficial, pero ya se sabía que Mirotic se marchará tras una polémica que estalló después de que el Barça eliminara al equipo malagueño. Salen informaciones desde Barcelona que apuntan a una reducción de entre un 25% y un 30% del presupuesto. En el Madrid sale Adam Hanga, un interesante jugador de rol, también Williams-Goss. Se cuenta en Madrid que se hace hueco para renovar a Tavares y Deck, con quienes las primeras conversaciones no están en muy buena sintonía. Madrid y Barça han rozado los 40 millones de euros, a veces rebasado, de presupuesto en las últimas temporadas. Seguirán siendo los más importantes, con mucha diferencia, de la ACB. Pero coincide que mengua, en menor o mayor cantidad, su presupuesto en un momento con el que el Unicaja aumenta su apuesta y puede rozar los 14 millones, como admitió hace unos días el presidente, Antonio Jesús López Nieto. Puede pasar de ser cuadruplicado a triplicado o doblado.

¿Significa que puede que aumente la capacidad de sorpresa? Es posible, admitiendo que los dos gigantes siempre serán los máximos favoritos porque su músculo, no sólo económico, es muy poderoso. El Baskonia recibe un impulso indirecto con el ascenso del Alavés a Primera División. En la capital vasca los dos clubes comparten la matriz y cuando en el fútbol hay más ingresos lo nota el básket. Las informaciones indican que va a pagar al Gran Canaria la cláusula de Khalifa Diop, que son 700.000 euros. Parecían pasados esos tiempos de abonos de traspasos tan cuantiosos. Y se va a mover con otros jugadores atractivos. En Valencia hay movimiento en los despachos con nuevo director deportivo y falta por ver en qué posición queda, sin en Euroliga o Eurocup. Se apuesta por Mumbrú.

La jerarquía de los futboleros se había acentuado en la última década. Algún título de Valencia y Baskonia de Liga, este del Unicaja de febrero en Zaragoza en la Copa... Pero son excepciones. Al baloncesto español también le conviene que haya movimientos jerárquicos, que no la final Madrid-Barça no sea la continua. Vienen unas generaciones de jugadores jóvenes que van a cambiar el baloncesto español. De 2004 a 2006, en el ciclo dorado del Unicaja, nacieron varias decenas de jugadores que, se va a vislumbrar las próximas semanas en los torneos de selecciones nacionales, van a irrumpir de manera salvaje en el baloncesto profesional. Y ahí también el Unicaja está bien posicionado con varios proyectos muy ilusionantes.

Son tiempos interesantes para el baloncesto español. Una unificación Eurocup-BCL podría ayudar a cambiar esa jerarquía. Pero el Unicaja va remontando una ola con buen impulso tras un año mágico en un momento en el que se palpa un cambio de ciclo. Puede llegar otro recordado en la historia del club malagueño si se sigue percutiendo.