Así es Daniel Carrasco, el malagueño subcampeón de Europa sub 16

España ha jugado las cuatro últimas ediciones de la final del Europeo sub 16 masculino y en todas hubo presencia de Los Guindos. En 2019 estuvieron Pablo León y Pablo Tamba, más Rubén Domínguez, que se había ido el año anterior y fue el MVP. Se ganó entonces nada menos que a la Francia de Wembanyama. No hubo torneo por el covid en 2020 y 2021. En 2022 Mario Saint-Supéry fue el MVP del torneo en una final que España perdió ante Lituania. El año pasado estuvieron en el título Guille del Pino, que recientemente comunicó su marcha a Córdoba antes de ir a la NCAA, y Rubén Salazar, que ese mismo verano decidió ir a Estados Unidos a estudiar al instituto. Y en este subcampeonato de 2024, en el que España cayó ante Francia en la final, estuvo otro malagueño, Daniel Carrasco. Un exterior que pasa el 1.90 metros y que sigue la estirpe de jugadores de nivel que sigue produciendo el baloncesto local.

El sampedreño (2008) llegó en edad infantil a la cantera de Los Guindos procedente del CB San Pedro. Desde entonces ha ido creciendo y llamando la atención. Ya la temporada pasada formaba parte del equipo que fue subcampeón de España cadete siendo de primer año con el Unicaja. Ha estado en órbita de selección española desde pequeño y ahora ha disfrutado de una gran experiencia culminada con una medalla. Ahora será parte del equipo junior que dirigirá Jesús Lázaro. 4.1 puntos, 3.4 asistencias y 2.2 rebotes para 6.1 de valoración en 13 minutos fueron sus medias en el torneo.

En estas dos últimas temporadas le ha dirigido Chiki Gil, técnico desde hace años del equipo cadete y también habitual en los cuerpos técnicos de la selección española (estuvo en el Mundial sub 17 de Málaga y en la sub 18 el año pasado), que explica cómo es la evolución del joven jugador malagueño. "La verdad es que muy contento por él, estar ahí ya es muy meritorio, es una generación con mucho talento exterior. Ha empezado jugando más en la fase de grupos y después algo menos en los cruces cuando se reducen las rotaciones, pero lo he visto muy bien", explica el entrenador paleño.

En un baloncesto que tiende a que se difuminen las posiciones, es una clásica pregunta con los talentos que vienen si es un uno o un dos. "A estas edades, es un combo. Está haciendo de uno muy claro con la selección y nosotros y ahí tiene que desarrollarse. Ofensivamente lo que destacaría es su capacidad para ventaja, también su capacidad de pase. En defensa tiene mucha habilidad para el uso de manos, para el robo. Tiene capacidad para eso, capacidad para generar fácil. Es muy vertical para atacar el aro, tiene que desarrollarse, sabe cuándo puede ir, pararse o pasar al compañero", señala el entrenador malagueño, que también quiere destacar el trabajo que hace fuera de la cancha: "Ha tenido buena evolución, con esta generación ya había destacado, no sólo este año, que también lo ha seguido haciendo. En infantiles lo hemos llevado a torneos y ya ha destacado. Tanto él como su familia hacen un esfuerzo muy grande, va y viene cada día de entrenamiento desde San Pedro. A pesar de eso es un muy buen estudiante y que le pasen cosas buenas como ésta es un premio a su buen trabajo dentro y fuera de la pista".

También ha jugado el Europeo sub 16 en su categoría B otro jugador del Unicaja, en este caso con Países Bajos, Tristan van Brandwijk. Ha acabado su país séptimo tras derrota a Suecia (73-58). Ha intervenido en seis de los ocho partidos, en los que ha promediado 9 minutos en juego, con 2.2 puntos y 2 rebotes por duelo. "También le hemos estado siguiendo, ha estado jugando 8-10 minutos. Es un proyecto más a largo plazo, se incorporó de Manilva, jugaba muy bien, es un tío grande, va teniendo una evolución, es un chico que hay que esperarlo. Tiene capacidad para jugar lejos del aro, echar balón al suelo, capacidad de tirar...", señala sobre el neerlandés criado en Málaga Chiki Gil.