El debate sobre el LEB

Málaga/A expensas de la oficialidad de Mathias Lessort, no hay dudas sobre ella en el Unicaja, apenas quedan gestiones pendientes en Los Guindos salvo que un golpe de mercado inesperado produzca alguna marcha y haya que barajar de nuevo. Ayer se confirmó la salida de Ignacio Rosa, uno de los proyectos más serios en los últimos años en Los Guindos, para que haga méritos y un periodo de instrucción fuera de Málaga, concretamente en Oviedo. Llegó con 12 años a la factoría cajista, ya jugó la Minicopa de 2012 de verde, desde Los Barrios. Hijo de Juan Rosa, ex jugador con una década en la ACB, ha estado esta temporada pasada a tiempo completo a las órdenes de Joan Plaza en los entrenamientos mientras jugaba en EBA. Con 2.08 metros y una mano privilegiada, hay madera pero debe crecer.

La salida de Rosa se produce al mismo lugar en el que estuvieron la pasada temporada Romaric y Karahodzic. El congoleño tuvo protagonismo, no así el bosnio. De ambos se ha desprendido este verano el Unicaja. Había varias proposiciones sobre Rosa y el Unicaja ha decidido repetir en Asturias con una de sus perlas. A tenor de la elección, gustó la manera de trabajar. Hay cambio en el banquillo, se marchó Carles Marco y tomó su relevo Javi Rodríguez, que había sido ayudante en las últimas temporadas. Fue, como Marco, un base de dilatada carrera en la ACB. "Ignacio es un jugador muy joven con muchísimo recorrido y proyección y será la primera vez que viva una experiencia profesional fuera del Unicaja, su club de origen. Tiene muy buen físico y, aunque es un jugador interior, tiene muy buena mano de tiro de tres puntos por lo que puede combinar las dos facetas. Tendremos que tener paciencia con él y trabajar mucho para que poco a poco vaya ayudando al equipo", decía el director general del club ovetense, Héctor Galán.

El Unicaja decidió en el verano 2016 años prescindir del equipo LEB, la vinculación con Clínicas Rincón, tras una década de fructífera colaboración. En ese escalón intermedio se moldearon jugadores ahora en la NBA, como Domas Sabonis o Abrines, y otros que ahora están en el primer equipo, como Alberto Díaz y Viny Okouo. Estimaba el club que no era rentable la inversión, pero ahora no hay ese paso entre el equipo junior y el profesionalismo. Echando un vistazo al resto de los clubes, mantiene el Barcelona un filial en LEB Oro y el Baskonia otro en LEB Plata. Mientras, el Joventut tiene vinculado en LEB Oro al CB El Prat y el Fuenlabrada al CB Tormes en Plata.

Con esta medida el embudo se ha hecho más estrecho y se selecciona más al jugador con el que se quiere mantener el vínculo. Rosa deja su hueco a caballo entre el ACB y el EBA a Morgan Stilma, un año menor. Viene ahora una generación interesante con varios internacionales españoles (entre sub 17 y 16 hay cinco ahora mismo) y se han retomado algunas apuestas por el mercado brasileño y africano (Matheus Maciel, Pierre Sené y Souleyman Traoré). Conviven para la recuperación de un equipo puente en LEB dos sensaciones en el Unicaja. La necesidad de que el jugador madure lejos de la calidez y la comodidad de una estructura de élite con la pérdida del control sobre sus evoluciones.