Un dúo propio de la élite europea

Una vez se confirme el fichaje de Carlos Suárez por el Unicaja, los verdes podrán presumir de tener una pareja de aleros del más alto nivel de Europa. El madrileño compartiría puesto con Kuzminskas, un proyecto de presente que cuenta con un gran futuro por delante.

Los malagueños ficharon bien este verano, tras numerosas opciones fallidas en el puesto de 3 en los últimos años que supuso un desembolso importante. Jugadores como Welsch, Blanco o Darden (este último con una lesión de por medio) fueron algunas de las fuertes inversiones hechas por los andaluces que no dieron el rendimiento esperado.

Para ver a dos aleros verdes entre los mejores del continente hay que remontarse hasta el año 2006, la temporada del título de liga. Ahí lucharon por jugar el francés Stéphane Risacher y el argentino Walter Hermann.

Desde la salida de los dos campeones de la ACB, muchos han pasado por esa posición, pero sólo uno se ha ganado el cariño de la afición. Carlos Jiménez, ahora portavoz del club, estuvo en el equipo malagueño como jugador durante cinco temporadas y media dando un nivel óptimo en los últimos años.

En España sólo Valencia, con Romain Sato y Vladimir Lucic, y Barcelona, con Papanikolau y Rabaseda, se acercan al nivel de los andaluces, si bien los catalanes han perdido a un activo importante como es Pete Mickeal. En Europa se encuentran el CSKA (Weems y Khryapa, siempre que el ruso juegue por fuera) y el Fenerbahçe de Obradovic (Kleiza y Bogdanovic) como los más fuertes en esta posición. Un escalón por debajo se sitúan el Efes Pilsen (Shipp y Vasileiadis), Milán (Moss y Gentile), Maccabi (Ingles y Smith) y, por último, el campeón de Europa, el Olympiakos (Perperoglou y Dunston), a pesar de haber perdido a Papanikolau. Ni siquiera el campeón de liga, el Real Madrid, posee un dúo de 3 como el de los verdes. Rudy Fernández y Tremell Darden, ambos por debajo de los dos metros, componen el ala blanco.

La fórmula del éxito depende en gran parte de tener aleros altos para la ayuda del rebote. El campeón de la Euroliga lo tuvo con Papanikolau y Perperoglou. Un jugador capaz de ayudar al rechazo y que pueda tirar desde la línea de 6'75. El año pasado, con Simon, Dragic y Vidal en esa misma posición, el conjunto malagueño sufrió para parar a rivales más fuertes y altos, lo cual generó graves problemas en el rebote defensivo. El mismo Kuzminskas reinó en el Carpena para llevarse la victoria con el Zalgiris.

Este nuevo giro de la dirección técnica verde supondrá un cambio de estilo en el juego cajista con jugadores capaces de luchar tanto por fuera como por dentro. Joan Plaza siempre ha jugado con aleros altos, tanto en su época en el Real Madrid (con Mumbrú y Hosley), como en Cajasol (Kirksay y Jasen) y Zalgiris (Kuzminskas) y lo quiere implantar en Unicaja con el lituano y Suárez.

En los últimos años, además de Simon, Dragic y Vidal, han pasado jugadores de la talla de Darden, Peric, Welsch o Jiménez, siendo estos dos últimos los que más temporadas estuvieron en el plantel. El puesto de alero es un problema a la hora de confeccionar una plantilla y esta vez el Unicaja parece haber dado con la clave para optar a ser los mejores de Europa en esta posición.