La exigente ruta del Barcelona antes de recibir al Unicaja
El duro calendario de la Euroliga hace que el equipo catalán solo tenga 48 horas de descanso entre la jornada continental y la doméstica
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El Unicaja afronta una verdadera prueba de nivel el próximo domingo. La visita de los malagueños al Palau se produce con los de Ibon Navarro en velocidad de crucero, tras nueve victorias consecutivas. Más allá de lo bien posicionados que están en la clasificación, son las sensaciones las que invitan a la ilusión. El equipo ya dio lo que entonces era una campanada, venciendo en la pista del Valencia con solvencia. Asaltar ahora la pista de un equipo de Euroliga, aunque lógicamente difícil, se percibe como algo más que plausible.
Malagueños y catalanes tienen dos rutas bien distintas hasta el encuentro del domingo. Los de verde jugaron en Grecia el martes por la noche, por lo que tienen casi una semana antes de la cita. Mientras tanto, el Barcelona está inmerso en una intensa semana de competición, con dos partidos de Euroliga en el calendario. El primero de ellos, el miércoles, se saldó con triunfo a domicilio en la pista del Mónaco (63-69). Hoy viernes reciben al Panathinaikos a las 20:30 horas, a solo dos días del encuentro con los malagueños.
La liberación del calendario, menos exigente en volumen de viajes y encuentros, que ofrece la BCL es una de las ventajas de la competición FIBA. Los equipos de Euroliga aumentan año tras años el presupuesto para poder seguir el ritmo de jugar otra liga, en paralelo a la ACB. Los jugadores del Barcelona llegarán al encuentro con los malagueños con 9 partidos más a cuestas, además de la exigencia del nivel que tiene la Euroliga. Esto se ha traducido ya en algún tropiezo de los de Jasikevicius en tiempos recientes, como la visita a Santiago, que se saldó con victoria local, y la derrota ante el Asvel-Villerbanne por la mínima, ambas seguidas a comienzos de diciembre.
Es más, lo del domingo es un duelo directo, quien lo hubiera dicho la pasada temporada, en una jornada que también trae un choque entre los dos primeros clasificados, Real Madrid y Tenerife, que solo están una victoria por encima de los cajistas y culés, por lo que la clasificación va a apretarse aún más. De los tres equipos de Euroliga a los que se ha enfrentado el Unicaja este curso, ha vencido con solvencia al Valencia. Ante Baskonia y Madrid cayó, muy al comienzo de la temporada. Los vitorianos inauguraban la campaña para los malagueños, que soñaron en el primer cuarto, pero que aún estaba en obras y le faltó la resistencia que ha demostrado tener en otros encuentros. Incluso ante los blancos, el partido se escapa en detalles, pero ya empezaba entonces a ser un molesto competidor el Unicaja.
El calendario y los tiempos de preparación de los partidos son otras de las variables que un equipo maneja dentro de todo lo que hay que hacer bien para ganar un partido. Luego la pista dictará la sentencia que tenga que dictar, pero en los prolegómenos del encuentro, la ventaja es claramente para los cajistas. El viento sopla a favor de los de Ibon Navarro, que ya sea avasallando al rival o sabiendo sufrir, se niegan a dar su brazo a torcer y ceder en un partido. Por mucho que sea fácil diseccionar el calendario en partidos fáciles, asequibles o difíciles, ganar nueve partidos seguidos como lo ha hecho este Unicaja.
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