Y el inconveniente de los Juegos

Algún movimiento en falso, pero el Unicaja no termina de lanzarse a por ese jugador trece que cierre la plantilla. Porque el tiempo y apurar ese último ataque puede ser una buena receta. No hay urgencias en encontrar esa pieza que complete el puzle, caerá tarde o temprano por su propio peso. Como se ha informado en los últimos días, el club ha recibido ofrecimientos de todo tipo, la bandeja de entrada está completa, de jugadores veteranos, buen recorrido europeo y plenamente capacitados para jugar en Málaga. Ese híbrido 'cuatro-cinco' como preferencia, pero el corte también lo marcará el mercado, en función de la intensidad del flechazo y cómo sea el salto de nivel. Pero se prefiere esperar. Los Juegos Olímpicos entran en su ecuador, con el desplazamiento de Lille a París, y el mercado se ralentiza. Ha sido la respuesta que se ha encontrado el Unicaja ante alguna consulta reciente, preguntar situaciones en una primera toma de contacto con agentes. Volverá a coger temperatura una vez acabe el torneo masculino, que prácticamente marcará el inicio de la actividad en los clubes. Ya sin distracciones y una última fase de mercado donde aún tendrán que caer piezas. Cuando se dé el caso, le tocará al Unicaja estar preparado y ser preciso en esa elección, casting que es amplio. Ha habido tiempo de recoger información.

Aún hay equipos de Euroliga sin cerrar su plantilla (Baskonia, Milán o Partizan) y el pívot siempre es una posición solicitada, especie además escasa. Hay pocos jugadores para tantos equipos, y el Unicaja es víctima. No se puede firmar un extracomunitario, otro condicionante. El mercado es como es y siempre puede haber vuelcos. Además, planea el caso de Osetkowski. el Unicaja desconoce si podrá contar y cuándo en ese caso en función de cómo se desarrolla la situación administrativa con un posible caso de dopaje, Juanma Rodríguez e Ibon Navarro buscan en el mercado un perfil de jugador que dé empaque al juego interior, que conforman Melvin Ejim, Tyson Pérez, el propio Osetkowski, David Kravish y Yankuba Sima. La operación truncada de Balcerowski completaba un juego interior idílico, pero la decisión final del Panathinaikos de no rescindir al polaco impidió una llegada a Málaga que estaba pactada desde meses atrás. Hay quien fantasea aún con la posibilidad de que acabe viniendo a Málaga si el vigente campeón de Europa encuentra, como buscaba, a otro jugador interior. Conforme pasa el tiempo es una posibilidad que se complica. No con rotundidad porque aún resta un último baile, otro de esos equipos incompletos es el Panathinaikos. Además, empezarán a confirmarse descartes de NBA, que ven Europa como un destino goloso, siempre caen por estas fechas movimientos de ese estilo, donde los Euroliga rompen la hucha. Pero todo ello se acelerará tras los Juegos, el tablero de ajedrez momentáneamente es otro.