Juanma Rodríguez, la lupa al sorteo de BCL para el Unicaja

Juanma Rodríguez, director deportivo del Unicaja, valoraba el sorteo para los malagueños en la fase de grupos de BCL. Oostende, King Szcezcin polaco y un rival de la fase previa por concretar. Primeras pinceladas, aún finales de junio, y unos rostros aún por desvelar en sus plantillas, también en el caso de los malagueños. "Como siempre digo, cuando hay sorteos de este tipo, a finales del mes de junio, todavía es pronto para saber las plantillas de nuestros rivales. Habrá que hacer una valoración más exacta cuando estemos cerca de arrancar la temporada, los equipos hayan confeccionado sus plantillas", aguarda el director deportivo cajista, palabras en los micrófonos del club, pequeño paréntesis antes de continuar con las gestiones de cara a la próxima temporada.

Empezando por el Oostende, "un clásico del baloncesto europeo, al que nos enfrentamos contra ellos recientemente (21/22), además recuerdo que perdimos en su pista. Dario Gjergja de entrenador, también de seleccionador belga, un equipo que siempre compite en BCL, siempre rondando los play offs, no será un rival fácil", dice Rodríguez. "Por otro lado, el King Szczecin polaco. Habrá que ver cómo termina de conformar su plantilla. Polonia es un baloncesto emergente, con varios equipos en las competiciones europeas, y tendremos que esperar para conocer su róster. Los equipos polacos suelen construir a partir de un 4-5 americano, con lo cual veremos el nivel que tenga en su momento. Y el otro equipo de la fase previa, visto los nombres de la fase previa, los que llaman la atención son PAOK y Cholet, viejos conocidos nuestros, que nos hemos enfrentado las últimas temporadas, con quizá el viaje más complicado, si es uno de estos dos equipos. Los otros, siendo Oostende es un vuelo directo a Bruselas y traslado cómodo, y a Polonia iremos a Berlín y después hora y media de autobús, con lo cual hemos salido bien parados", explicaba el director deportivo.

Continuidad para Moller

El danés Marcus Moller, que cumplió su segunda temporada con el equipo junior del Unicaja (más concretamente, una y media porque empezó a jugar ya entrada la 2022/23), continuará la próxima temporada en Los Guindos jugando con el equipo de Liga EBA a pesar de que ya pasa a categoría senior. El club considera que el jugador, que actualmente prepara ya el Europeo sub 18 con su selección, tiene proyección por delante. Mide 2.15 metros y es de desarrollo físico tardío, aún podría subir algo más. No ha sido, pese a ello, un jugador dominante en la categoría junior pero sí se le han visto progresos. Y cumplirá el ciclo de tres años con el club.

En principio será el único jugador de los que cumple la edad junior (excepto el caso de Mario Saint-Supéry, que ya tiene contrato profesional) que continúe vinculado a la entidad. Por ejemplo, Baba Badji, que llegó a debutar con el primer equipo en la Supercopa pasada y así consta ya en el muro de Los Guindos, se marchará, con el resto de la generación. El resto seguirá su carrera, algunos con opciones de continuarlas en Estados Unidos. La idea es que Jesús Lázaro vuelve a dedicarse únicamente al equipo junior masculino, como se pensó la temporada anterior hasta que tras la destitución de Francis Trujillo en el equipo femenino hizo que compatibilizara los dos banquillos, en una decisión un tanto extraña, con preferencia para el Unicaja Mijas. Estuvo después ya en el Campeonato de España.

Respecto a Moller, no hay previsión, como era el deseo del club, de que su hermano August, que deslumbró en la Minicopa disputada en Málaga, se incorporara al equipo cadete. Los padres prefieren esperar a que acabe los estudios en su etapa de secundaria hasta los 16 años antes de moverse. Se intentará mantener un vínculo con él y que venga a Málaga cuando cuadre porque su proyección es muy alta.