Liga ACB y Unicaja, cambio de tendencia o coyuntura casual

Un vistazo al Casademont Zaragoza-Baxi Manresa del pasado sábado, una oda al baloncesto con medio billete para la Copa del Rey en juego, ejemplifica el altísimo nivel medio de la Liga Endesa, de largo la mejor de Europa. Lo suelen comentar los jugadores novatos en la Liga, que vienen de otras en las que se puede jugar con el freno de mano en un alto porcentaje de partidos. No sucede eso en la Liga ACB, en la que hay disparos entre cada equipo, ya puedan enfrentarse líder y colista. Nada es imposible. En esta revoltosa primera vuelta en la que dos equipos de Euroliga, Barcelona y Baskonia, tienen serios problemas para ir a la Copa del Rey y han estado o están fuera de zona de play off, se está acentuando esa tendencia. Años atrás, Txus Vidorreta, entrenador del Tenerife, decía “una vez entramos en noviembre o diciembre, con los equipos de Euroliga rodados, es casi imposible ganarles, tienen otro ritmo”. Y así lo decían los números entonces, el porcentaje de victorias era mínimo de los otros 14 o 15 equipos de la Liga Endesa. Ahora el péndulo ha variado. Pero, ¿hay un cambio de tendencia o es algo coyuntural por un pico alto de otros equipos y uno bajo de los gigantes? Es una pregunta que flota en el mundillo del baloncesto y que obviamente no tendrá sólo una causa.

Ibon Navarro era cuestionado por la prensa local en Miribila por el hecho de que los grandes no copen ahora los primeros puestos de la ACB. El mejor equipo de la primera vuelta no será Baskonia, Madrid o Barcelona, sino Unicaja o Valencia en un precioso duelo que se jugará el próximo sábado en el Carpena. Visto cómo están los cuadros parece que habrá poca diferencia entre ser cabeza de serie o no por nivel teórico de los rivales en la Copa del Rey, aunque siempre hay esos refuerzos edificantes por el trabajo bien hecho. “Lo de ser cabeza de serie podía ir bastante envenenado. Ya lo veremos. Es bonito que el último partido por el liderato sea entre Unicaja y Valencia Basket. Valencia está haciendo una temporada espectacular, batiendo el récord de anotación en una primera parte en los últimos 18 años (67). Es bonito que primero y segundo no sean Madrid y Barcelona, sino que el mejor baloncesto no lo juegan equipos de secciones, hablamos de Tenerife, Gran Canaria, Unicaja, Valencia. Eso es positivo. Sabemos el peaje que tiene jugar la Euroliga y que a estos equipo no les da. Queda mucho. Será un partido bonito, pero anecdótico por qué puede tocar”, explicaba el técnico vitoriano en el pabellón bilbaíno tras el partido.

Y es que existe esa sensación de que las fuerzas se igualan por más que el presupuesto de los transatlánticos sigan siendo muy superiores y que también parezca que cuando les hace falta de verdad, véase ayer el Barcelona en Gran Canaria, puedan tener un marcha más. El Unicaja ha ganado dos de los últimos seis títulos nacionales en juego (Copa 2023 y Supercopa 2024) en juego, en los que sólo las finales de Liga’23 y Copa’24 fueron Madrid-Barcelona, en los años anteriores una rutina en cualquiera de las competiciones. El Tenerife pisó una final de Copa, el UCAM Murcia llegó a una final de Liga, el propio Unicaja también jugó otra final de Supercopa... Todo en este periodo de dos años.

El Baskonia, con la Euroliga como su modo de ser, se ha desenganchado de los títulos nacionales, con dificultades para estar presente en Copa y play off con cierta frecuencia. El Madrid sigue siendo el equipo más regular, aunque se haya humanizado algo, y la salida de Jasikevicius del Barcelona ha bajado un punto su competitividad en la búsqueda de un entrenador que sea el faro de un proyecto que no deja de tener jugadores de capacidad superlativa. Un punto esencial en el ánalisis es el desgaste físicos de los jugadores, con la exigencia la Euroliga que lleva a que prácticamente no tengan entrenamientos con cierta continuidad. También ha subido la profundidad de las plantillas y el Unicaja está siendo pionero a través del método Ibon en ese reparto casi matemático de esfuerzos que se ha revelado exitoso. Madrid, Barcelona y Baskonia están constantemente en el mercado. El Unicaja maneja una plantilla de 14 jugadores, el Valencia también la tiene amplia al mismo nivel. Sito Alonso, no obstante, reconocía esta semana que “14 son muchos jugadores” cuando el UCAM tiene que reajustar la plantilla. Los clubes medios y pequeños han construido herramientas, sin tanto volumen de partidos y exigencias físicas, para hacer cosquillas y competir de manera habitual con los grandes. Y hay otros tipos de baloncesto muy atractivos, distintos al rodillo físico que impera en la Euroliga. De ahí a considerarlos favoritos o a arrebatarles títulos hay un gran trecho. En los próximos meses se podrá constatar si es una tendencia general o una coyuntura concreta que los gigantes no acumulen toda la plata gracias a las grandes inversiones. Y ahí el Unicaja, en las alturas, espera pacientemente acontecimientos.