Preolímpico: Alberto Díaz, determinante en la reacción de España ante Finlandia

Con el 61-56 favorable a Finlandia y una España que no terminaba de arrancar, emergió la figura de Alberto Díaz. Impresionante el capitán del Unicaja en una secuencia de acciones en el inicio del último cuarto, con dos triples liberados cuando la pelota quemaba, y un robo tirándose de cabeza al suelo para dar un pase de espaldas y regalar una canasta a Brizuela, generando ese clic (74-81) con una selección desacertada y que no transmitía buenas vibras. Se pasó al 63-64, aún con ocho minutos por delante, pero el malagueño sostuvo y cambió la tendencia de un partido que hasta ese momento era una maraña, con poco acierto y mascándose la tragedia. España se agarró al Preolímpico, con poco margen de preparación para la final, ya con Bahamas descansando en el hotel durante toda la tarde (20:30 horas). Se ganó una vida, y un chute de moral. Sería unos terceros Juegos Olímpicos para un jugador malagueños tras Nacho Rodríguez (Sidney’00) y Berni Rodríguez (Pekín’08, con una medalla de plata). El capitán del Unicaja sumó 7 puntos, esos dos triples importantes y un tiro libre al final. Se quedó liberado en varias situaciones y acabaría con un 2/4 en lanzamientos de tres. Mostró fiabilidad en Málaga en la 23/24 y alargó ese acierto en Valencia. Un rebote, una asistencia, dos robos y 8 de valoración.

Correosa la selección finlandesa, que ya puso unos problemas enormes en el Eurobasket de 2022, quién sabe si el equipo escandinavo puede marcar un punto de partida en las aspiraciones españolas. Enorme Willy Hernangómez, tomando esa pócima mágica de los veranos, solo conoce la fórmula Scariolo: el pívot del Barça anotó 28 puntos (8/12 en tiros de dos y 12/15 en tiros libres), 5 rebotes y 29 de valoración. Tiene que aparecer esa versión de Willy para lograr ese billete, aprovechando la falta de músculo de los interiores finlandeses, pero con otro lenguaje corporal a lo visto con su club. Esa dupla con Lorenzo Brown, con 15 puntos aunque con un discreto 5/13 en tiros. Va carburando el nuevo jugador del Panathinaikos. No tuvo España la chispa, pero aprovechó su momento mejor que nadie. Partido de alternativas, con los cuartos pares a favor de los de Scariolo, que tardó en encontrar la llave. Estaba en el banquillo: Alberto Díaz. Otra muestra del peso que tiene el malagueño en esta selección, sin grandes alardes y minutajes, pero dos o tres cosas concretas y ejecutadas a la perfección para que España subsistiera. Será más difícil frente a Bahamas, por la entidad del rival, con Deandre Ayton, Buddy Hield y Eric Gordon, un trío de NBA determinante; con los dos últimos tendrá que bailar el capitán del Unicaja.